El traslado de Fiateira Motor a la carretera de Baños de Arteixo despeja el camino para la ampliación de la intermodal. En los últimos meses se ha ido despejando el margen derecho de la avenida del ferrocarril de negocios o se ha tapiado para prevenir okupaciones.  Aunque la avenida de A Sardiñeira, al otro lado, de la estación, será la que sufra una mayor transformación la avenida de Ferrocarril también será vital para la intermodal. 

Será el Ayuntamiento el que se encargue de llevar a cabo las obras. En la avenida entre la ronda de Outeiro y la calle de General Rubín ya se ha cortado el carril en sentido a Lonzas. Allí está previsto construir una rotonda que mejorará la conexión con la Tercera Ronda y, por tanto, con el aeropuerto de Alvedro. El extremo de la avenida do Ferrocarril los trabajos empezaron tras acabar unas obras de saneamiento que empezaron hace semanas en la misma calle. Se trata de mejorar elementos como aparcamiento y área de parada y bolsa de taxis. 
 

Además, también se construirá un paso que servirá para comunicar la avenida del Ferrocarril con el aparcamiento que se está construyendo debajo de la estación de autobuses. En un principio, estaba proyectado construir un paso sobre las vías que permita o acceso a la intermodal desde la avenida del Ferrocarril, un paso destinado sólo a peatones y bicicletas.
 

El Ayuntamiento demandó en septiembre a la Xunta la construcción de nuevo vial de acceso que conecte la dos avenidas (Ferrocarril y A Sardiñeira). El objetivo era retirar el 79% de las rutas de bus de la rotonda de A Grela, y crear un segundo acceso, facilitando así la entrada a la nueva estación, algo que ya estaba previsto, igual que la construcción de  cinco edificios de escasa altura entre la avenida y la estación.