Dos policías de la Brigada Móvil de servicio en la estación de San Cristóbal, atendieron a un hombre se había desplomado en un bar cercano. Los hechos sucedieron el 23 de septiembre, y tras constatar que carecía de pulso y no respiraba, y uno de ellos inició las maniobras de reanimación cardiopulmonar.
Su compañera regresó a la estación de tren, donde recogió el desfibrilador externo DESA después de solicitar una ambulancia. Consiguieron que recobrara el puso y estabilizarle y posteriormente fue trasladado al Chuac.