Desde hace ya “varios años”, los vecinos de la zona de O Birloque tienen una reivindicación sobre la mesa que no acaba ser atendida, a pesar de su insistencia en las peticiones. Se trata de la puesta a disposición de todos aquellos que lo necesiten de un comedor social para cubrir las necesidades alimentarias básicas de numerosas familias. 
 

“En esta zona viven muchas personas necesitadas, que lo pasan verdaderamente para poder llegar a final de mes y para poder hacer tres comidas al día de calidad. Creemos que un comedor social serviría para cubrir esa necesidad”, explica Ramón Mañana, presidente de la asociación vecinal Os Anxos.
 

Mañana destaca que se trata de una solicitud que viene de años atrás, y que constantemente es reiterada para que no caiga en el olvido. “Sin ir más lejos, la semana pasada presentamos un escrito dirigido al Ayuntamiento en el que volvíamos a reivindicar esa necesidad. Vamos a ver si esta vez sirve para algo y al menos lo tienen en consideración”, explica el representante vecinal. “Hace años, también hicimos una recogida de firmas entre los vecinos para dejar claro que es algo necesario y no tuvo mucho efecto”, añade.
 

Además del comedor, Mañana considera que la zona necesita también otro tipo de instalaciones para equipararse a otros barrios de la ciudad, y considera que todas ellas deberían ser abordadas lo antes posible. Entre esas demandas, se encuentran una biblioteca y un centro cívico. “Creo que tampoco es pedir nada del otro mundo. Son unos servicios básicos que serían muy útiles y que creo que con un poco de voluntad, podrían salir adelante y beneficiarnos a todos”, explica.

Escaño ciudadano

Mañana sostiene que esta reivindicación ya fue llevada en su día al pleno municipal, a través del escaño ciudadano, que permite llevar al centro del debate político diferentes asuntos de interés para los vecinos. “El problema es que el tiempo que nos dan allí para exponer nuestras reivindicaciones es muy poco, y además, es siempre al final del pleno, como metido a calzador después de varias horas de debate”, explica.
 

En todas sus peticiones, incluida la realizada hace tan solo unos días, Mañana propone una ubicación para estas instalaciones. “Hay un local municipal en la avenida de Glasgow que se encuentra casi en desuso. Es muy grande, pero la mayor parte de él no se aprovecha. Y es una lástima, porque sería un lugar ideal para albergar tanto el comedor como la biblioteca o un centro cívico”, lamenta.
 

“Si finalmente se pudiesen poner en funcionamiento estos servicios, se generarían más puestos de trabajo y toda la zona tendría más movimiento, lo cuál sería muy positivo para que el barrio pudiese avanzar”, señala Mañana, que espera que las reivindicaciones de los vecinos no caigan de nuevo en saco roto.