Los montes de Galicia reúnen todas las condiciones para el crecimiento de hongos comestibles y el otoño es la estación que ofrece más posibilidades para disfrutar de ellos, en la naturaleza o en la mesa, pero siempre con cuidado, siguiendo las indicaciones de los que saben, como están haciendo estos días en Curtis, convertido en epicentro de la micología de la provincia de A Coruña.
Es la Festa do Cogomelo en Teixeiro. Uno de los acontecimientos del otoño en la comarca que, como cada año, citó a cientos de aficionados a la micología que, después de salir al monte, pudieron saborearlos de veintidós maneras distintas, las mismas que establecimientos se adhirieron en esta edición –la vigésimo segunda– a una muestra que se consolida en Galicia.
Recogida
Así, para empezar, más de 25 aficionados no dudaron en madrugar un sábado para salir al monte acompañados por expertos de la Asociación Pan de Raposo y recorrer “tres zonas do municipio con diferente variedade de vexetación para a recollida de exemplares de cogomelos”, indican desde del Ayuntamiento de Curtis. Consiguieron recoger más de sesenta distintas y todos se exponen para su conocimiento este domingo, día 30 de octubre, en el centro de Teixeiro.
Con todo, la agenda de actividades de alargó hasta la noche, con la X Ruada de Teixeiro, organizada por la Asociación Cultural Faragulla, con actividades didácticas y cursos de iniciación impartidos por Álex Cangado y Serxio Pérez, y numerosas alternativas de animación desde las 17.00 horas, además de una ‘foliada aberta’ para cerrar el sábado con más música, sorteos y oferta culinaria, en la plaza de España.
Mientras, en otros municipios del entorno, el fin de semana empezó con actos de Samáin. Fue el caso de Carral, que celebró un magosto en el Campo da Feira