El templo parroquial de Orto, en las inmediaciones del embalse de Abegondo-Cecebre, se llevó la peor parte de la fortísima tormenta que sorprendió ayer a los vecinos del área de A Coruña. El suceso ocurrió alrededor de las 23.00 horas cuando, según los vecinos, se oyó "como si fuese una bomba". Esta mañana, desplazados hasta la iglesia, comprobaron el alcance de los daños que, de acuerdo con una primera valoración, obligará a demoler el campanario ante el riesgo de colapso.
Algunas piezas de granito de la estructura dañada saltaron por los aires y aparecieron en varias fincas de alrededor. La Guardia Civil y Protección Civil de Abegondo acordonaron el templo, donde se prohibió la entrada ante el peligro de derrumbe.
Hasta Orto se desplazaron el alcalde, José Antonio Santiso Miramontes, y el párroco, que indicaron que, a la espera de determinar el alcance de los daños, las celebraciones de Santa Margarita, previstas para los próximos días, se trasladarán a una capilla próxima.