Con calles dedicadas a Calderón de la Barca, Lope de Vega, Quevedo, Ramón de Campoamor, Tirso de Molina, Miguel de Cervantes y una plaza que recuerda al nativo Manuel Murguía no es especialmente sorprendente que el Gobierno local de Arteixo se decante por establecer en la urbanización Sol y Mar una biblioteca digna de tan literario lugar.
El alcalde, Carlos Calvelo, anunció recientemente que el Ayuntamiento ha adquirido un inmueble, en la plaza principal de este núcleo de la parroquia de Pastoriza, que servirá de albergue para los centenares de libros que ahora se custodian en unas instalaciones compartidas con un centro social.
Una vez que finalicen los trabajos que se están realizando en el local municipal, la biblioteca pasará a ser totalmente independiente en el bajo comprado recientemente.
La ampliación de la biblioteca se enmarca dentro del proyecto de la reforma de la plaza Galán. Es esta última la arteria central de la urbanización.
La iniciativa tiene como objetivo la creación de una gran área de ocio con diferentes zonas: parque infantil, recintos biosaludables y zonas verdes de descanso. Se trata de una plaza alargada de 115 metros de longitud y 24 de ancho, con bloques contiguos de edificios a ambos lados de la explanada.
Se da la circunstancia que desde la rotonda que enlaza las calles Quevedo y Calderón de la Barca desciende con una fuerte pendiente.
Según fuentes municipales, el espacio es acorde con la época en la que se inició la construcción del barrio, por lo que los distintos niveles están construidos en base a estructuras de hormigón y taludes vegetales que, actualmente, incumplen las mínimas normativas de accesibilidad.
Esta circunstancia ha derivado en que los residentes apenas utilizan el espacio por lo que el Ayuntamiento ha decidido recuperar su funcionalidad para ser ‘pieza fundamental’ para regenerar todo el barrio.
La previsión es que la reforma se inicie a finales de este mes o principios del próximo y una vez formalizado el contrato que las obras se lleven a cabo en el plazo de tres meses.
El proyecto contempla la construcción de grandes plataformas circulares, de 180 metros cuadrados de superficie, que estarán unidas por otras más pequeñas. El aspecto del espacio será de esta forma serpenteante, creando una nueva sección que carece de grandes saltos de nivel.