En unos días Diana Piñeiro dará a conocer la estructura del nuevo Gobierno de Cambre. El de cuatro ediles conservadores en una corporación de 21 en que casi todos se consideran de izquierdas y donde nada es imposible tras la renuncia de dos alcaldes antes de alcanzar la mitad de un mandato iniciado en 2023.
¿Cómo están siendo estos primeros días como alcaldesa de Cambre?
Están siendo intensos, de toma de contacto con todos los departamentos. Un aterrizaje.
¿Tiene clara cuál será la estructura del nuevo Gobierno de Cambre?
El núcleo central lo tengo claro pero quedan algunos detalles y otros aspectos están por decidir. En unos días la anunciaré.
¿Ha podido hablar con la alcaldesa saliente, María Pan?
Nada. No hubo ningún tipo de comunicación.
¿Cree que esto va a ser igual todo el mandato o que puede cambiar la actual relación con UxC?
Mi deber es buscar el entendimiento por encima de todo. El entendimiento y el diálogo. La situación del municipio es crítica y esa es mi obligación, independientemente del color político.
Mi deber es buscar el entendimiento por encima de todo
Siempre ha dado la impresión de que el Partido Popular está más en sintonía con las habilitadas nacionales de lo que lo estaba UxC. ¿Considera que eso, de alguna manera, le va a ayudar en la difícil tarea que supone enderezar la situación de Cambre?
Las habilitadas nacionales hacen su trabajo de manera correcta y cumplen con su deber, y nuestra postura en la oposición siempre ha sido la defensa de la ley, actuar dentro del marco de la ley, en defensa de los intereses de los vecinos pero cumpliendo con lo establecido. Mi papel desde el principio ha sido ese, el de cumplir la ley y defender el dinero de los vecinos de Cambre. Que cada uno lo interprete como quiera.
¿Cree que ahora que el Partido Popular encabeza el Gobierno de Cambre continuará la concordancia con PSOE y BNG?
Si todo aquello que planteemos supone una solución a la situación actual, yo creo que sí, que seguirá igual. Cuento con que estarán a la altura siempre que lo que pongamos sobre la mesa sea una salida para Cambre. Esto es una transición. Vamos a ver, es una situación por mandato electoral. Yo no busqué esto ni traté de buscar aliados para llegar aquí, no. Esto es una responsabilidad impuesta que yo asumo, sin duda.
Cuento con que (PSOE y BNG) estarán a la altura siempre
que lo que pongamos sobre la mesa sea una salida para Cambre
¿En algún momento usted o el partido se plantean no postularse como candidata dado que ahora mismo son cuatro ediles de 21?
Vamos a ver, desde el partido siempre hubo una gran preocupación porque son conscientes de la enorme responsabilidad que se asume. Pero también, por encima de todo eso, son conscientes de mi compromiso con los vecinos de Cambre. La dificultad está ahí pero por encima de todo eso está la responsabilidad que yo asumí cuando decidí entrar en política.
¿Descarta cualquier coalición con la izquierda dadas sus diferencias ideológicas o aún cabe alguna posibilidad, por remota que sea, de alcanzar algún acuerdo por la estabilidad de Cambre?
Es posible colaborar de muchas formas. Pueden ser unos grandes colaboradores sin necesidad de entrar en el Gobierno. Cada uno desde su formación puede defender su postura, sus ideas o manera de entender Cambre pero colaborar, participar en las decisiones y llegar a un acuerdo común.
¿Cuáles son, a corto plazo, los primeros retos como alcaldesa de Cambre? ¿Qué es lo que consideras que es lo más importante y lo primero que hay que afrontar?
Lo primero es tratar de solucionar las facturas que están por pagar, y luego el tema del personal. La elaboración de un RPT (Relación de Puestos de Trabajo) consensuado, que dé una cobertura y que dé una garantía a los trabajadores. Y recuperar personal para poder trabajar con una cierta normalidad. Porque a día de hoy no se puede por esa falta tan grave de personal. Esas serían las prioridades. Y luego, a partir de ahí, todo lo que yo alcance y pueda. Lo que haga falta.
¿Tendrán que partir de cero o pueden salvar algo de la RPT que elaboró Unión por Cambre?
A lo mejor algo puede valer pero hay que estudiarla a fondo y somos más partidarios de hacer algo más completo y que dé una cobertura mayor, más garantías. Vamos a reunirnos con los sindicatos e intentar hacer algo con lo que estemos todos de acuerdo.
¿Teme no poder acabar esta u otras iniciativas antes de 2027?
Por mi parte, lo voy a dar absolutamente todo. Mi entrega es total. Pero también hay que ser conscientes de la realidad y pedirme que solucione esto en dos años cuando lleva más de diez en una situación caótica es pedirme un milagro. Por mi parte, todo y más. Pero hay que ser conscientes de donde partimos, de las posibilidades que existen y del plazo tan corto del que disponemos.
Hay que ser conscientes de donde partimos, de las posibilidades
que existen y del plazo tan corto del que disponemos