No habían pasado ni 48 horas de su derrota en el estreno de la Liga de Campeones contra la UD Oliveirense (5-1) cuando el Deportivo Liceo saltó a la fría pista del Palacio de Riazor para medirse al Arenys de Munt en una nueva jornada de la OK Liga.
 

El equipo coruñés cambió el chip y se desquitó del varapalo de la Champions con un inicio arrollador ante uno de los rivales más débiles de la competición doméstica: el Arenys es penúltimo con solo nueve puntos en 16 partidos.

Pol Manrubia, en el segundo palo tras una certera asistencia del capitán Dava Torres, César Carballeira, al transformar un penalti, y Arnau Canal, que transformó un envío de Fabri Ciocale en una preciosa volea de espaldas a la portería, encarrilaron el triunfo con tres tantos en solo doce minutos de juego.

El acertado arranque del Liceo, con la novedad de Mati Bridge en la portería pero los mismos diez hombres en la convocatoria, pareció aturdir al Arenys, que se defendió como gato panza arriba para evitar una goleada mayor al descanso.

Goles psicológicos

Precisamente un error de Bridge acabó en el 3-1, obra de Lluc Vilà, un gol que dio vidilla a los visitantes justo antes de pasar por los vestuarios.
 

El 4-1 cayó a los nueve segundos de la segunda mitad con una jugada de pizarra. Dava asistió a César, que recibió en el carril central y remató de cuchara a la media vuelta cerca del palo. Ni así se rindió el Arenys, que volvió a recortar la distancia, otra vez por mediación de Vilà con algo más de 15 minutos de juego.

El Liceo puso el candado a su portería y cerró la séptima victoria consecutiva en la OK Liga. Segundo clasificado, durmió cuatro puntos por debajo del Barça y cinco por encima del Reus, aunque los dos con un partido menos.