La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, aseguró que la institución seguirá subiendo los tipos de interés para devolver la inflación a la meta del 2% al creer que no hay pruebas claras de que la tasa subyacente tocase techo, aunque reconoció la importancia de “evaluar cuidadosamente” la fuerza de transmisión de la política monetaria a las condiciones financieras y la economía.
Así lo manifestó después de que Eurostat anunciase que la inflación de la eurozona se moderó en mayo al 6,1% desde el 7%, en mínimos de febrero de 2022, mientras que la tasa subyacente frenó por segundo mes consecutivo, al 5,3%.
Así, Lagarde dijo que el BCE debe continuar con el ciclo de subidas de tipos hasta estar seguro de que la inflación va por buen camino para retornar al objetivo de manera oportuna. “Hoy, la inflación es demasiado alta y está destinada a permanecer así durante demasiado tiempo. Estamos decididos a reducirla a nuestro objetivo del 2% de manera oportuna”, aseguro, reiterando que aún queda “terreno por recorrer” para llevar las tasas a niveles suficientemente restrictivos.
Por su parte, el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, señaló que la actual senda de subidas de los tipos de interés, que comenzó en julio de 2022 y subió en 375 puntos básicos el precio del dinero tras siete alzas consecutivas, se aproxima a la “recta final”, en la que un aumento de 25 puntos básicos es la “nueva norma”.
El economista español reiteró, en una entrevista en RNE, que la cuantía de las subidas en este tramo final dependerá de los datos entrantes, así como de las nuevas proyecciones macroeconómicas y de la transmisión de la política monetaria. Para Guindos la situación de tipos muy bajos, incluso negativos, de los años anteriores es algo del pasado que no era normal y auguró que, al menos en los próximos tres o cuatro años, los tipos estarán en niveles ligeramente positivos.
Sobre el adelanto electoral en España, aseguró que es importante la estabilidad política, aunque defendió que España cuenta con fortalezas económicas sea cual sea el resultado.
Así, destacó que España cuenta con un sistema financiero saneado y que exporta más de lo que importa, lo que demuestra que es una economía competitiva.