España propuso este sábado a sus socios de la Unión Europea crear un nuevo instrumento financiero común en el que puedan participar también países extracomunitarios para acometer grandes proyectos de defensa con el fin de dar un impulso a corto plazo al gasto europeo en este área.
El ministro de Economía español, Carlos Cuerpo, trasladó la propuesta a sus homólogos durante un consejo informal en Varsovia centrado en buscar vías para financiar un incremento de las inversiones que la UE ve indispensable para reducir su dependencia en este área de Estados Unidos, en particular tras el giro de la administración Trump con respecto a la guerra de Ucrania y sus presiones para subir el gasto en la OTAN.
"La propuesta busca no solo aumentar el gasto inmediatamente, sino utilizar estos recursos más eficientemente coordinando las necesidades de seguridad del continente", dijo Cuerpo sobre una propuesta que España concibe como "solución transitoria" para financiar de modo "más rápido" el impulso a la defensa hasta que esta partida se integre en el presupuesto comunitario o se encuentren opciones a más largo plazo.
Este instrumento, que tomaría la forma de una entidad con propósito especial temporal y estaría abierto no solo a Estados miembros, se nutriría de las contribuciones de los países participantes - según una clave que aún está por determinar- y estos podrían aumentarlas de manera voluntaria.
Estos fondos permitirían dar subvenciones y préstamos para financiar proyectos europeos a gran escala y se complementarían con otras fuentes de financiación comunitarias, como emisiones de deuda común europea, ya sea de programas previstos o de otros nuevos, según explicaron desde el Ministerio de Economía.
También podría contribuir el Mecanismo Europeo de Estabilidad - el fondo de rescate de la eurozona que tiene 400.000 millones en capacidad de préstamo - y utilizarse los activos rusos inmovilizados en la UE por las sanciones a Rusia, cuyo valor asciende a unos 200.000 millones de euros y de los que actualmente solo se están usando los ingresos extraordinarios que generan para ayudar a Ucrania.
España defiende que este instrumento sería "más fácil y rápido de establecer en el corto plazo para construir una industria europea de defensa competitiva", ya que otras opciones como el aumento del presupuesto plurianual de la UE - algo que también ha planteado Madrid - tardarían años en poder implementarse.
"Este es el momento de la solidaridad europea para apoyar a Ucrania y a los países del Este situados en primera línea. Tenemos que invertir juntos en defensa, que es un auténtico bien público europeo que beneficia a nuestros ciudadanos y aumenta nuestra seguridad económica", dijo Cuerpo.
La propuesta sería complementaria al plan de rearme de la Comisión Europea, que prevé flexibilizar las normas fiscales para permitir un aumento del gasto en defensa que podría generar 650.000 millones de euros en cuatro años y un instrumento de 150.000 millones de euros en préstamos financiados con la emisión de deuda común para acometer compras conjuntas de defensa.
La iniciativa española llega en un momento de creciente interés entre los socios para encontrar más opciones de financiación para defensa y el comisario europeo de Economía, Valdis Dombrovskis, aseguró que el Ejecutivo comunitario "está listo para explorar nuevas opciones" como esta.
La propuesta española "encaja bien en las discusiones" que están manteniendo los Veintisiete, dijo en una rueda de prensa tras el encuentro, subrayando que aborda puntos como la necesidad de considerar la defensa "bien público europeo" o la asimetría en las amenazas de seguridad entre los diferentes países.
"Vemos un despertar en Europa en términos de seguridad. La posición de algunos países es diferente a la que era hace uno o dos años y la voluntad de gastar más es mayor", dijo el ministro polaco de Finanzas, Andrezj Domanski, quien destacó que la "mayoría" de socios cree que podrían ser necesarias más medidas de financiación y celebró la "solidaridad" de los países del Sur con los del este y centro de Europa en este sentido.
En todo caso, subrayó que su prioridad será lograr un acuerdo "con urgencia" sobre las propuestas de la Comisión Europea, en el caso del instrumento SAFE "ya en mayo".
Dombrovskis insistió también en no ralentizar la implementación de las medidas que ya están sobre la mesa e invitó a los países a solicitar antes de finales de abril la flexibilidad en las reglas fiscales para que en julio esté aprobada y puedan aprovecharla para aumentar su gasto.