El ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares, ha dado por zanjado el "incidente puntual" en la relación entre España e Israel surgido tras el "gesto inamistoso" que supuso el comunicado emitido ayer por la Embajada israelí.
En rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros, Albares ha desvelado que ayer habló con la embajadora de Israel en España, Rodica Radian-Gordon, tras el comunicado en el que la legación diplomática israelí condenaba las declaraciones "inmorales" de ministros españoles en apoyo de Hamás.
La conclusión de dicha conversación, ha dicho Albares, es que ambos iban a "trabajar conjuntamente para que esa amistad entre Israel y España se mantenga como hasta ahora".
Ha indicado que fue antes de emitir la respuesta de Exteriores cuando él llamó a la embajadora para trasladarle su "profundo disgusto" por su comunicado y para trasladarle que lo consideraba un gesto "inamistoso". Le anunció también en dicha conversación la nota que su departamento iba a hacer pública y en la que se rechazaban las "falsedades vertidas" por la embajada israelí.
Albares ha explicado además que la embajadora está en permanente contacto con el Ministerio de Exteriores, como el resto de embajadores, que traslada en esos contactos su opinión sobre lo que toca a la relación bilateral.
Ha señalado asimismo que mantuvo días atrás una reunión con Radian-Gordon y con representantes de las comunidades judías en España para trasladarles la solidaridad de España ante los ataques terroristas a Israel y donde intercambiaron impresiones sobre cómo veían la situación y quedaron en seguir en contacto permanente.