El portavoz adjunto de Unidas Podemos en el Congreso, Enrique Santiago, ha señalado que el acuerdo para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) “parece que está cerca”, aunque ha advertido de que el PP “va a poner muchas zancadillas” y “vetos” para evitar este acuerdo, por lo que no tienen que caer en esas “provocaciones”.
Así lo ha indicado en declaraciones a los medios en el Congreso el diputado de IU y negociador del grupo confederal con el PSOE para el desbloqueo del órgano de gobierno de los jueces, sobre el estado de los contactos para desbloquear el relevo de vocales en el órgano de gobierno de los jueces.
Durante estos días Podemos ha criticado la exclusión que plantea el PP a la presencia de la delegada del Gobierno contra la violencia de género, Victoria Rosell, y ha recalcado que defenderá su candidatura al CGPJ hasta las “ultimas consecuencias”, como hoy ha explicitado la ministra de Igualdad Irene Montero.
Santiago ha criticado el “secuestro” de años del Poder Judicial por parte del PP al igual de los “meses” de retraso en la renovación del Tribunal Constitucional, por lo que la coalición está trabajando para “acabar” con esta situación.
Es más, ha proclamado que su objetivo es que finalice dicho “secuestro” para que la justicia sea “más independiente, más democrática”, se preocupe por los problemas cotidianos de la gente y se acabe en España con el “lawfare” (guerra judicial) y con la “persecución” a la izquierda por parte de determinados sectores de la justicia.
Eso sí, Santiago ha añadido que Unidas Podemos es consciente de que el PP “no quiere ese acuerdo” y va a “poner muchos problemas”, “trampas”, “zancadillas” y “muchos vetos”.
“Nosotros no vamos a caer en esas provocaciones. Lo importante en este momento es que no pase lo que ya pasó hace un año, que se frustró en el último momento un acuerdo por las trampas del PP y porque del CGPJ depende desbloquear el TC, del que dependen cosas tan importantes en este país como garantizar el derecho al aborto, que la reforma laboral continúe o la Ley de Eutanasia”, ha zanjado.
Preguntado de nuevo sobre la figura de Rosell, ha reiterado de nuevo que ha sido “claro” y que en el espacio confederal están “acostumbrados a las tramas zancadillas y permanentes problemas que pone el PP para salir de la situación”.
Mientras, el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, ha remarcado que el acuerdo para renovar el Poder Judicial “está por encima de los nombres”, al ser preguntado sobre la candidatura de Rosell, para formar parte del CGPJ.
A su vez, la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha asegurado que se continúa negociando sobre la renovación del organismo y que por su parte no habrá “nada más que discreción”, mostrado así prudencia respecto a la cuestión de los nombres.
Ayer, el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, insistió en la exigencia de que la delegada del Gobierno contra la violencia de género forme parte de la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y lanzó que “nadie progresista puede apoyar” el “veto ad hoc” planteado por el PP a su figura.
También aseveró que existe “unanimidad” dentro de Unidas Podemos de que el veto del PP a Rosell es una “infamia política” y que la apuesta colectiva es que en esa negociación para intentar que no se ejerza, dado que su inclusión es garantía de “regeneración” en la institución.
Los contactos habituales dentro de la coalición sobre el CGPJ los mantienen el titular de Presidencia, Félix Bolaños, y el portavoz adjunto del grupo confederal y representante de IU, Enrique Santiago. Dentro del espacio confederal la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha convocado varias reuniones con representantes de los partidos para analizar la situación de la negociación.
Todas las ramas de Unidas Podemos apoyan la posibilidad de que Rosell sea candidata, como hizo el presidente del grupo parlamentario Jaume Asens la semana pasada, si bien Díaz e IU han abogado por no publicitar nombres y centrar esa discusión de forma discreta en el ámbito negociador. Mientras, Podemos presiona públicamente para que sea candidata formal con la advertencia de descolgarse de ese pacto.
No obstante, fuentes de Unidas Podemos han recalcado que Rosell es una posibilidad que está encima de la mesa pero también hay otros perfiles que contarían con el aval del espacio confederal. Y es que hay voces que reconocen que la candidatura de la delegada del Gobierno contra la violencia de género suscita complicación ante el requisito de optar por perfiles que no tengan vinculación con la actividad política.
que en un pispás haya sorpresas”, ha admitido.