El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, defendió el voto socialista en las elecciones de mayo por ser la alternativa “empeñada” en dignificar las condiciones laborales, los salarios y la pensiones, frente a los “poderosos” que solo defienden sus intereses y ofrecen “el sálvese quien pueda” a la mayoría social. 
 

Así lo dijo Sánchez en Sevilla, donde participó en un acto en apoyo del alcalde de la capital hispalense, Antonio Muñoz, en el que también estuvo presentes las ministras de Hacienda, María Jesús Montero, y la de la Educación, Pilar Alegría. 
 

En clave electoral, Sánchez desgranó los avances conseguidos en los tres años de legislatura de los “gobiernos de la gente” que, ha dicho, han logrado que España “hoy pinte mucho y para bien en Europa en favor de la clase media y de los trabajadores y trabajadoras de nuestro país”. 
 

Entre ellos, citó el cierre de 2022 con un crecimiento de la economía de más de un 5%, la consecución de las tasas de inflación más bajas de la eurozona, así como una alta tasa de empleo desconocida “desde hace más de quince años, antes de la crisis financiera”, o el ahorro en más de 4.000 millones de euros que ha supuesto para el contribuyente la solución ibérica ante la crisis energética provocada por la guerra de Ucrania.

Con el viento a favor

Y todo ello, dijo Sánchez, “con una pandemia, una guerra, una Filomena y un volcán”, por lo que animó a sus posibles votantes a imaginar todo lo que va a poderse lograr “cuando el viento sople a favor”. 
 

Por ello, ante las próximas elecciones locales, generales y regionales de 2023, el responsable del PSOE pidió a los ciudadanos que, al margen de lo que hayan votado con anterioridad, piensen en qué país y ciudad quieren antes de emitir su voto. 
 

Considera que deben decidir si quieren gobiernos que suban el salario mínimo interprofesional o que lo congelen como sucedió en el pasado; que revaloricen las pensiones según el IPC o las suban un 0,25%; que primen la convivencia en vez de la confrontación territorial, o que apuesten por la sanidad pública y la dignidad de sus profesionales o por los recortes.  A juicio del presidente del Gobierno esas son las preguntas que los votantes deben hacerse ante los próximos comicios porque “lo demás es ruido y ganas de marear la perdiz”. 
 

Sánchez también avisó de que no permitirá retrocesos en el derecho de las mujeres a abortar y censuró que el PP siga el camino “que le marca” Vox, como, a su juicio, quedó claro por las medidas antiabortistas que puso en marcha el Gobierno conformado por “la coalición del miedo” de ambos partidos en Castilla y León.
“La derecha decide qué camino tomar y lo que está claro es que, después de lo que hemos conocido en Castilla y León, la derecha sabe qué camino ha tomado y es el que le marca la ultraderecha”, lamentó Sánchez.
 

Ante estas medidas antiabortistas, el presidente del Gobierno ratificó el compromiso “total y definitivo” del Ejecutivo con las mujeres y no permitirá “que haya un retroceso en el derecho de las mujeres a decidir libremente cuando ser madres o no”.
 

En este sentido subrayó que “con gobiernos socialistas lo que va a haber son avances en beneficios de las mujeres y ni un solo retroceso”.