MeteoGalicia, organismo meteorológico dependiente de la Consellería de Medio Ambiente, pronostica que Galicia vivirá un mes de agosto seco y caluroso, tras un julio en el que llovió y en el que se registró una humedad algo superior a la prevista, aunque también, pese a la "percepción social", fue "muy cálido" --con una temperatura media 1,1 grados por encima de lo esperado--.

Ya en agosto, tras un primer fin de semana "de playa", la meteoróloga María Jesús Souto anticipa que el próximo irá por el mismo camino. Este martes lloverá en algunos puntos de la comunidad, pero "a partir del miércoles" volverá el anticiclón y, hacia finales de semana, ha avanzado que se esperan avisos por altas temperaturas en Galicia.

Souto ha comparecido ante los medios acompañada de la titular del departamento autonómico de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, quien ha destacado la labor de MeteoGalicia también desde la perspectiva de cuidar la salud, dado que abordan cuestiones como la incidencia de los rayos ultravioleta.

En cuanto a julio, el avance del último informe climatológico mensual del organismo meteorológico refleja que el periodo estuvo caracterizado por tres partes bien diferenciadas. En la primera de ellas, la primera semana del mes estuvo marcada por tiempo seco y soleado, con temperaturas normales y en línea con los valores esperados para julio.

Mientras, a partir del día 6 predominaron las borrascas y, por tanto, el tiempo fue más húmedo y fresco de lo que cabría esperar en este mes. Pero a partir del 21, las jornadas se vieron marcadas por situaciones de sol e incluso de intenso calor en días concretos, que obligaron a activar el sistema de avisos por episodios de altas temperaturas en coordinación con la Consellería de Sanidade.
 

El 23 de julio, el más caluroso

De hecho, ha señalado que el 23 fue el día más caluroso de todo el mes, durante el cual se superaron los 40 grados en varios puntos de la comunidad, siendo la máxima absoluta registrada los 41,8 grados alcanzados en el ayuntamiento ourensano de A Arnoia.

Por otra parte, la conselleira ha recordado que julio es el mes más seco en Galicia, pero este año los frentes registrados entre los días 6 y 20 acumularon más agua de lo habitual, lo que permitió equilibrar el balance pluviométrico de todo el periodo.

Así, el mes pasado acabó con un 3% más de precipitaciones de lo esperado, teniendo en cuenta los registros obtenidos en las estaciones gallegas más representantivas en el periodo de referencia 1981-2010, lo que hace que se pueda considerar un julio dentro de la normalidad en cuanto a las lluvias, con un promedio de 44 litros por metro cuadrado.
 

En todo caso, el análisis por zonas revela "una gran variabilidad" en los distintos puntos del territorio, concentrándose las precipitaciones más elevadas en la comarca de Muros (con casi 162 litros/metro cuadrado) y las más bajas, en las de A Limia y Terra de Lemos (que registraron en ambos casos menos de 4 litros/metro cuadrado).

Por último, y con respecto a las perspectivas para el mes que acaba de empezar, Vázquez también ha ratificado que los grandes centros meteorológicos a nivel mundial que hacen este tipo de previsiones (Copernicus en Europa y la NOAA en EE.UU.) están de acuerdo en pronosticar un agosto más cálido y algo más seco que la media climática.

En todo caso, en la línea de Souto, con la que compareció en MeteoGalicia, ha precisado que las previsiones estacionales "no tienen una fiabilidad muy alta en lugares como Galicia, una comunidad sometida a influencias cruzadas" (atlánticas, continentales europeas y africanas).

Esta coyuntura explica la alternancia de periodos cálidos y secos con otros más frescos y húmedos, tal y como ocurrió en julio, por ejemplo.