Desde que se le perdió la pista a Diana Quer, el pasado 22 de agosto, los investigadores se han centrado tanto en encontrarla a ella como a una pieza fundamental en el puzzle de su desaparición: Su teléfono móvil. A primera hora de la mañana de ayer, un mariscador que se encontraba faenando bajo el tramo del viaducto de la Autovía de O Barbanza más próximo a Cespón, notó que algo extraño aparecía en su rastro. Su sorpresa vino cuando se dio cuenta de que era un iPhone 6 blanco, exactamente igual al de la joven madrileña.
El hombre, del que no han trascendido más datos pero se cree que podría ser del lugar de Bealo (Boiro) y tener 38 años, llevaría trabajando en la Cofradía alrededor de un año. En el momento del hallazgo se encontraba capturando almeja y berberecho junto con otros compañeros en el mencionado punto, justo en el otro extremo del viaducto donde se encuentra el muelle de Taragoña, último lugar donde los testigos sitúan a la joven madrileña.
Una vez fue consciente de lo que había encontrado, el mariscador procedió a acudir al cuartel de la Guardia Civil de dicho municipio, al filo de las dos de la tarde, donde hizo entrega del terminal a las autoridades.
Según ha podido saber Diario de Arousa, el iPhone se encontraba lleno de barro en el momento de su hallazgo, dado que la zona donde apareció se caracteriza por una importante corriente marítima, además de por la presencia de cuantioso lodo, motivo por el cual, quizás, pese a las mareas, el terminal no se habría movido del lugar donde fue lanzado al agua desde la última vez que emitió señal. Este descubrimiento en la Ría viene a dar un giro a la investigación sobre la desaparición de Diana Quer. En primer lugar confirma que la joven pasó de A Pobra hasta Taragoña y el hecho de que el móvil pudo ser tirado desde el puente de la Autovía de O Barbanza al mar, tal y como adelantó hace semanas Diario de Arousa.
Sin embargo, pese a lo importante del hallazgo, algunas fuentes señalan ya la dificultad que se encontrarán los investigadores para lograr extraer alguna información del terminal.
Poco después de que saltase la noticia, la zona de la Cofradía de Rianxo se convirtió en un hervidero de medios de comunicación tratando de contactar con el protagonista de la noticia, aunque éste no ha querido dar su versión sobre lo sucedido por el momento.
Cabe recordar que el sumario sobre la investigación de la desaparición de Diana Quer permanece bajo secreto por orden del Juzgado de Instrucción Número 1 de Riveira hasta el 20 de noviembre, según la última prórroga acordada. n