El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha avalado que los parlamentarios y parlamentarias del PP que así lo deseen puedan utilizar el gallego en el Congreso de los Diputados. "La medida está en vigor, si los gallegos deciden utilizarla están en su derecho, también los del PP, y yo no vería absolutamente ninguna cuestión", ha aseverado el también el jefe de filas de los populares gallegos.
Así lo ha trasladado en la comparecencia ante los medios posterior a la reunión semanal de su Ejecutivo, donde ha sido preguntado por el paso dado este jueves en la Cámara baja, cuyo pleno ha aprobado la reforma de su Reglamento que regulariza el uso de las lenguas cooficiales tanto en los debates como en las iniciativas parlamentarias y lo ha hecho con el voto en contra del PP, Vox y UPN.
El resto del hemiciclo ha respaldado el texto, que ha salido adelante con 180 votos, cuatro por encima de la mayoría absoluta que requería y con el sí por error de la diputada por Ourense Rosa Quintana. Rueda ha manifestado su convicción de que el voto de la exconselleira fue "involuntario y un error".
"Estoy seguro de que quería votar otra cosa de lo que votó", ha añadido, en una comparecencia en la que ha afirmado que no tendría inconveniente en que los diputados populares que lo consideren oportuno utilicen el gallego en la Cámara baja. A su modo de ver, no es una cuestión que, aprobada la medida, tenga que "monopolizar" el BNG. "Ya le gustaría", ha apostillado.
Además, ha rechazado evaluar la opción de que el PP recurra el uso de las lenguas cooficiales en el Congreso al Tribunal Constitucional (TC) con el argumento de que no le consta que esté sobre la mesa tal cuestión --aunque el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, no descartó dar el paso este mismo jueves, en una rueda de prensa simultánea a la reunión semanal del Consello de la Xunta--.
Y preguntado acerca de si comparte con Feijóo que la aprobación del uso de las lenguas cooficiales en el Congreso es "una mala noticia", ha replicado que la "muy mala noticia" es que el foco esté en el uso "de pinganillos" en el Congreso mientras los independentistas catalanes "venden caro" su apoyo para la hipotética investidura del socialista Pedro Sánchez, "con 450.000 millones".
"Mientras nos tienen entretenidos con temas de pinganillos, estamos viendo que mucho hablar de la defensa de las lenguas pero cuando llega a la UE vemos que no es cierto, que hay un intentar contentar a (Carles) Puigdemont, y que estamos con que todas las lenguas son iguales, pero lo que importa es la lengua que nos hace falta por la investidura", ha esgrimido, antes de pedir "un poco menos de cinismo" a los "promotores de estas ideas".
Investidura con precio
Tras expresar su respeto a distintas opiniones y críticas, ha añadido que lo que más le preocupa es, en todo caso, enterarse de que "la investidura ya tiene precio y que son 450.000 millones de euros". "Nada más y nada menos", ha apostillado, muy crítico con que "a nadie de la oposición parlamentaria en Galicia" (PSdeG y BNG) le alerte esta situación.
Así, ha concluido que, en lo que a él respecta, esta coyuntura es la que se debe priorizar en el debate público, por lo que no entiende que este sea el momento idóneo para priorizar la medida del uso de las lenguas cooficiales en el Congreso.
"Desde luego, el momento no es ahora. Ni de broma", ha proclamado Rueda, quien también ha sido preguntado por el manifiesto a favor del uso del gallego en el Congreso que firman, entre otros, algunas personalidades destacadas del ámbito social y cultural en la Comunidad, y sobre que se esté poniendo en duda su compromiso "estatutario" con la defensa del idioma.
Al respecto, Rueda ha indicado que, aunque todas las críticas puedan ser "respetables", él no las puede "compartir". Ha argumentado que él como presidente defiende la lengua, pero lo ha distinguido de que, ante el debate generado, la prioridad bajo su punto de vista es otra. De hecho, ha sugerido que dicha opinión puede "no ser compartida" por "motivos o planteamientos políticos claros".
Y sobre las críticas de "traición" por parte de la líder del BNG, Ana Pontón, ha rebajado la importancia de un calificativo "efectista y tremendista" que, ha alegado, "no tiene nada que ver con la realidad".
Asimismo, ha censurado que los nacionalistas se "entretengan tanto" con los "pinganillos" pero no haya "ni una sola consideración" al "precio" de "450.000 millones por la investidura" o sobre la postura del Gobierno en la UE, al priorizar el catalán.
Dicho esto, en una pregunta posterior, tras reivindicar el "enorme respeto" y la "obligación" de defender la lengua propia, ha remachado que, a su modo de ver, no hace a nadie "más gallego" defender el uso de esta lengua en el Congreso "pensando que nada es más importante". "Nos hace más gallegos que no nos quiten recursos para dárselos a otros", ha contrapuesto.
Finalmente, preguntado acerca de las manifestaciones del lendakari, Iñigo Urkullu, sobre su ausencia de contactos con Sánchez tras el último encuentro que mantuvieron y si él ha tenido una relación más fluida con el ahora presidente en funciones, ha respondido que desearía que este, que estuvo en Oroso (A Coruña) el domingo en un acto de partido, visitase Galicia "institucionalmente" con más frecuencia.
En todo caso, ha concluido que no le sorprende lo manifestado por Urkullu en el sentido de que, cuando él visitó La Moncloa, le comprometió "muchas cosas y luego no cumplió ninguna".