Una de las mejores formas de darle vida a una ciudad es a través de propuestas originales que les dan una segunda vida a locales antiguos. Hemos visto innumerables veces ejemplos de edificios de siglos pasados que son reformados para poder acoger tiendas nuevas que no se deshacen del concepto original. De esa forma, la ciudad vive sin necesidad de hacerse un lavado total de cara, al mismo tiempo que se mantienen las raíces, sus cimientos.
Sin embargo, ¿alguna vez hemos escuchado hablar de un quiosco al que se le da una segunda vida? Usualmente relacionamos estos pequeños puestos con un solo objetivo: la compraventa de productos de alimentación que se pueden comer (o no) en el momento, como chucherías o una botella de agua, a lo que se le suma también una amplia gama de revistas o periódicos. ¿Pero qué más nos puede ofrecer un quiosco? David supo ver el gran potencial de este rincón y, desde el primer momento, supo a la perfección lo que quería hacer.
Situado en la Rampa del Matadero de Montealto, El Spot Quiosco & Coffee ha nacido como una nueva iniciativa que buscaba darle una segunda vida al quiosco que llevaba años ubicado en ese lugar, convirtiéndolo en una cafetería y lugar de encuentros en el que las personas no solo se paran a comprar un producto, sino que se pueden sentar a disfrutarlo y a hablar con David mientras disfrutan de las vistas que las cristaleras despejadas del antiguo quiosco les ofrecen.
Así lo cuenta David, su responsable: “La idea empieza porque mi esposa y yo queríamos abrir una cafetería. Yo soy cocinero desde hace 8 años y mi esposa fue encargada en Massimo Dutti en Inditex en Barcelona. Cuando nos venimos para acá estábamos buscando un local donde poder iniciar con los planes de la cafetería, pero nos encontramos con este quiosco. Como vivimos arriba en el Rebollo pasábamos mucho por aquí. Las vistas al mar junto a la rampa del Matadero nos dejaban fascinados”.
Desde el primer momento David tuvo muy claro que lo que quería era un concepto diferente a un quiosco “de toda la vida”, dándole una segunda vida como una cafetería. La principal razón por la cual quería añadir una cafetería a este lugar era porque su esposa salía a trabajar a Juan Flórez muy pronto y por la zona no había ningún tipo de local abierto tan temprano donde pudiera comprar un café. Por ello, David vio una excelente oportunidad para poder traer al barrio de Montealto algo diferente.
Paralelamente, otro de sus objetivos era crear un nuevo lugar que atrajese también a ese público que no frecuenta los quioscos, es decir, el público de mediana edad, entre los 18 y 45 años. De esa forma podrían mantener a aquel público que siempre visita los quioscos, como los niños y las personas de avanzada edad, sumando también a nuevos clientes. Mientras que los niños acuden a por chucherías, las personas mayores suelen comprar allí las revistas o periódicos del día. Añadiendo una cafetería, se puede ampliar el público y también atraer a las personas de mediana edad que deseen tomarse un café o comprar algo de bollería recién hecha.
David sigue hablando acerca de su plan inicial con el quiosco: “Desde el primer momento tuve claro que quería abrir un quiosco con cafetería. De hecho, si no me dejaban poner la cafetería no iba a cogerlo. Siempre pensé que era algo necesario porque, al igual que las personas leen a diario el periódico o las revistas, también beben a diario café. Es una parte esencial de nuestra rutina”, explica.
Café de especialidad
Actualmente, El Spot tiene disponible café Astro, proveniente de la primera y una de las mejores tostadoras de café de especialidad en A Coruña. De hecho, David también nos cuenta la odisea por la que tuvo que pasar hasta dar con Astro: “Nosotros estábamos buscando café comercial, pero las empresas más comerciales no nos daban una respuesta muy positiva. La mayoría nos decían que no íbamos a vender tanto café, así que yo empecé a buscar café de especialidad. Al principio me rehusaba a hacerlo porque no soy barista y entiendo que, en el mundo del café de especialidad, es necesario tener algo de experiencia en ello. Entonces hablé con Willy, que es uno de los socios de Astro, y le comenté el proyecto. Fui directamente al tostador y me dijo “David, me encanta el proyecto. No te preocupes, que en una semana estás haciendo un café de puta madre”. Y así le fue guiando en las bases del café de especialidad, concluyendo con la primera colaboración de El Spot Quiosco.
Aunque no solo ofrecen café, sino que también cuentan con té chai o matcha, a lo que se le suma también una neverita de exposición llena de zumos, bebidas energéticas y refrescos ya preparados para tomar y llevar, justo como sucede con un quiosco clásico. También ofrecen café triturado de Astro, el cual se puede comprar directamente en el quiosco para poder hacerlo en casa. Y es que el buen renombre de Astro está extendido por toda A Coruña, por lo que hay muchas personas que se han alegrado enormemente de ver una marca como esa presente en El Spot, debido a su gran calidad y excelente sabor.
Otra de las novedades que David quería añadir a El Spot eran las revistas internacionales, agregando artículos de surf aprovechando la cercanía con el Matadero, conocida por ser una playa excelente para surfear. De momento no tienen una gran cantidad de productos, pero están empezando a añadir más. Venden parafina y varias revistas especializadas en surf, las cuales no se pueden encontrar en ningún otro quiosco de A Coruña, como Surfer’s Journal, proveniente de California, o Sheseas, especializada en las mujeres que se dedican al surf. David aclara: “Las revistas no es que hayan muerto, sino que simplemente hay muchas personas que tienen sus hobbies y que quieren leer sobre sus pasiones. Eso es algo que hay que ofrecérselo también, pero para ello hay que buscarlo”.
Una de las mejores formas que un negocio tiene para crecer, nos cuenta David, es a través de colaboraciones. De nada sirve mantener una actitud frívola y alejada de los demás locales y negocios de nuestro alrededor, sino que hay que entenderlo como un mundillo en el que todo el mundo, si quiere, puede salir beneficiado. Es por ello que, a pesar de que El Spot todavía está dando sus primeros pasos, ya tiene varias colaboraciones.
Hasta hace poco tenían publicada una obra del fotógrafo Alexander Castro, la cual había llevado físicamente hasta El Spot. También han empezado a vender por las tardes rollitos de canela de Buen Rollo, negocio que abrió recientemente y está causando furor en A Coruña. Es un producto que se agota en cuestión de horas, pues hay quienes no quieren ir hasta el centro de la ciudad a por ellos, así que El Spot los vende y crea una colaboración con Buen Rollo en el que ambos salen ganando. La colaboración más reciente es con Old School, quienes tienen un club de surf especializado en longboard. Van a inaugurar un nuevo local y han invitado a que el encargado de El Spot lleve sus revistas de surf, por lo que va a aprovechar la ocasión para llevar también su cafetera y ofrecer su café de Astro.
Actualmente, la calle que rodea El Spot está en obras, lo cual podría haber significado un declive en la actividad del quiosco, pero David no lo ve así en absoluto. Piensa en el hecho de que, cuando las obras terminen, todo quedará muchísimo mejor. Y es que El Spot todavía va a cumplir su primer mes el próximo lunes, pero ya ha conseguido ganarse un lugar en el corazón de los vecinos de Montealto y todo aquel que se ha pasado por su pequeño local. Esto no es más que obra de la autenticidad de su encargado, quien tuvo desde el primer momento la intención de volver El Spot Quiosco en un rellano de paz: “Quiero que la gente también tenga este sitio como algo donde me desconecto 5 o 10 minutos de lo que sea que esté haciendo. Me siento, me bebo un café, disfruto un ratito, me leo una revista, lo que sea. Esa es una de las principales ideas”.