Viñas del Cénit presenta la añada 2020 de su vino más exclusivo, Cénit Pago Las Salinas. Se trata de un vino que nace de una única parcela que cuenta con 120 años situada en el corazón de la recóndita Tierra del Vino de Zamora, donde, durante años, el cultivo de la vid estuvo en el centro socio económico de la comarca. Hoy en día, sin embargo, la viña vieja en este lugar es una auténtica superviviente a las circunstancias de abandono que vive el entorno en lo que se llama ‘la España vaciada’. “Vinos como Pago Las Salinas, contribuyen a mostrar el enorme valor que son capaces de aportar estas viñas. Nuestro compromiso en Viñas del Cénit es transmitir la enorme riqueza de este patrimonio vinícola que aún nos queda”, explica José Manuel Benéitez, enólogo de la bodega.
Únicamente se han elaborado 1.987 botellas de este vino, elaborado 100% con la variedad Tempranillo, dominante durante muchos años en el viñedo de la zona. “Vendimiamos nuestro viejo Pago Las Salinas recogiendo en pequeños racimos de uva muy concentrada. Posteriormente lo pasamos por una doble mesa de selección, primero de racimos y después uva a uva para quedarnos únicamente con lo mejor de lo que nos llega del campo”, explica Benéitez. “En bodega se realiza un trabajo muy cuidadoso y sutil únicamente con el propósito de mostrar la personalidad de esta parcela tan especial”.
Pago Las Salinas muestra infinidad de matices en la copa. “Se trata de un vino que ofrece una experiencia única al observar su evolución mientras lo estás disfrutando”. Cuenta con la característica potencia de la variedad Tempranillo de la zona. “Nuestro reto en este vino es recoger toda la personalidad de esta parcela. Solo los grandes vinos son capaces de expresar esa singularidad con equilibrio, intensidad y elegancia”.
Pago Las Salinas “es un vino tinto con estructura, pero a la vez muy equilibrado por la frescura que aporta este viñedo situado a 800 metros de altitud y por una viña vieja que aporta finura, elegancia", asegura el enólogo de Viñas del Cénit. "Sorprenden sus notas minerales, especiales y balsámicas ”.
La bodega
Viñas del Cenit comienza su andadura en la histórica Tierra del Vino de Zamora en 2004 cuando sus fundadores visitaron la zona y quedaron impresionados al encontrar viñedos que superaban los 100 años en un lugar recóndito y prácticamente olvidado. Consideraron que estos viñedos estaban en el Cénit y, con ellos, arrancaron un proyecto que, en el año 2007, se incorporó a lo que hoy es Terraselecta, una compañía que, en ese momento, buscaba de viñedos singulares que mostraran la personalidad de diferentes territorios vinícolas españoles.
La bodega se centró inicialmente en elaborar vinos con la variedad Tempranillo: uva mayoritaria en la zona, igual que en el resto de España, donde la hegemonía de la Tempranillo hizo que se dejaran de lado en muchos territorios otras variedades autóctonas o la elaboración de vinos blancos.
En 2019 se produce un punto de inflexión en Viñas del Cénit con la incorporación de José Manuel Benéitez como enólogo. Él venía de trabajar en Arribes, una zona donde la elaboración de vinos multivarietales era una de sus señas de identidad y comprobó que en la viña había auténticos tesoros que era necesario poner en valor. Un ejemplo es la uva blanca, una de las grandes olvidados de la zona.
Bajo estas premisas, en 2023 la bodega dio un paso más en su objetivo de reflejar la identidad de la zona con el lanzamiento de la colección Field Blend: un tinto, un blanco y un clarete, que hablan de cómo eran los vinos de Tierra del Vino de Zamora en sus orígenes, cuando se plantaron los viñedos que hoy llegan a los 120 años. Con esos mismos viñedos y la misma filosofía de utilizar todas las variedades que existen en la viña vieja, nació una colección que ofrece una visión mucho más amplia, fidedigna y completa de lo que es una tierra donde el vino formaba parte de su idiosincrasia: una identidad propia basada en un viñedo muy viejo, enormemente diverso y con auténticas joyas que aún están por descubrir.