El Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda de Turquía, reivindicó el atentado contra el Ministerio del Interior turco en Ankara, que costó ayer la vida a los dos atacantes.
“Hoy a las 9.30 hora local (6.30 GMT) un equipo de nuestro Batallón Inmortal ha llevado a cabo una acción contra el Ministerio del Interior turco”, señaló un comunicado atribuido al PKK y publicado por la agencia de noticias Firat, que suele funcionar como portavoz de la guerrilla kurda.
La nota aseguró que la acción fue un “éxito” y acusa al Gobierno turco de “ocultar descaradamente” las pérdidas sufridas en el atentado en el que, según la versión oficial, solo fallecieron los asaltantes, causando únicamente heridas menores a dos policías.
El comunicado subrayó que el atentado se cometió el día de la apertura del Parlamento (tras el receso de verano) y que, de haberlo querido así los militantes, eligiendo una hora distinta, podría haber tenido “resultados muy diferentes”.
Sin embargo, la organización prefirió únicamente “hacer llegar un mensaje y una seria advertencia” por la “guerra contra el pueblo de Kurdistán” impulsada por el “régimen fascista del AKP-MHP”, la coalición de los dos partidos que respaldan al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
El comunicado identificó con nombre y apellido a los dos autores del ataque y aseguró que cometieron el atentado para conmemorar a Hülya Demirel, también conocida como Axin Mus, una comandante del PKK que fue abatida, según el Ministerio del Interior turco, hace dos semanas junto a otros tres militantes en la provincia de Diyarbakir.
El PKK, considerado terrorista tanto por Turquía como por la Unión Europea, luchó entre 1984 y 2013 por la independencia de las regiones kurdas del sureste de Turquía, pero renunció a este objetivo en 2013, iniciando un proceso de paz, roto dos años más tarde.
En los últimos años, casi todos los combates entre el Ejército turco y miembros de la guerrilla han tenido lugar en el norte de Irak, donde el PKK tiene su retaguardia.