El Gobierno de Ucrania pidió ayer a la comunidad internacional su apoyo al plan de paz del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para poner fin al conflicto con Rusia, durante la Cumbre para la Democracia auspiciada por Estados Unidos (EEUU).
El ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, intervino en el foro de forma telemática en lugar de Zelenski, quien canceló su intervención para visitar el frente. “Insto a todos los países a aunar esfuerzos para poner en práctica el plan de paz de Ucrania. Cada país, enfatizo, cada país puede contribuir a la causa de la paz participando en su implementación”, dijo Kuleba.
El titular de Exteriores recordó los diez puntos que integran su propuesta de paz: la seguridad nuclear, la alimentaria, la energética, la ambiental, la liberación de los presos ucranianos, la restauración de la soberanía de Ucrania, la retirada de las tropas rusas, la aplicación de Justicia, medidas de prevención y garantías del fin de la guerra.
Y en velada referencia a la propuesta de paz china, avisó de que cualquier “concesión” a Rusia solo servirá para que el Gobierno de Vladímir Putin “gane tiempo para restaurar sus capacidades militares y reanudar su ofensiva contra Ucrania”.
El ministro aseguró que la invasión rusa no solo busca “destruir Ucrania”, sino también “acabar con el orden mundial establecido por el orden internacional y la Carta de Naciones Unidas”. Por eso, reivindicó que las tropas de su país “no solo luchan por su futuro”, sino que también están “defendiendo a todo el mundo democrático”.
Durante la primera sesión de la Cumbre para la Democracia, el secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken expresó su apoyo al plan de paz de Zelenski. Blinken opinó que esta guerra “podría terminar mañana” si Putin decidiera retirar las tropas que ocupan parte del este de Ucrania.
Además advirtió de que cualquier petición de un alto el fuego en las condiciones actuales, por mucho que pueda parecer “bien intencionada”, solo serviría para que Rusia “consolide” la ocupación. En la sesión también participaron los ministros de Exteriores de Francia, República Checa, Francia, Israel, Italia, Malaui, Liberia, Argentina y Japón.
Zelenski aprovechó la intervención de Kuleba para pasar ayer revista a las unidades de las fuerzas de seguridad ucranianas que protegen la frontera con Rusia en la provincia de Sumy, en el noreste de Ucrania. La visita se produjo días después de que Rusia bombardeara de forma masiva esta provincia que fue parcialmente ocupada por los rusos al comienzo de la invasión y liberada por las fuerzas ucranianas en abril de 2022.
Durante su viaje el presidente también participó en la conmemoración del primer aniversario de la batalla de Okhtyrka contra el ejército ruso y de la liberación de Trostyanets. Zelenski condecoró a soldados y funcionarios públicos que participaron en estos hechos.
En el frente sur, Rusia está disminuyendo la intensidad de sus ataques, al destruir las fuerzas ucranianas parte sustancial de sus depósitos y reservas de municiones en la zona, declaró ayer la portavoz del Comando Operacional Sur ucraniano, Nataliia Humeniuk.
Según Humeniuk, el ejército ruso tampoco puede “transferir armas y equipamiento adicional, incluidos morteros,” porque las unidades ucranianas “han destruido con éxito sus posiciones” y las condiciones meteorológicas adversas en el Mar Negro “están limitando su libertad de movimiento”.