Con el sugerente titulo de “Energía femenina”, la galería ARGA ofrece una exposición de Lola Saavedra y Nuria Vilanova (O Porriño, Pontevedra, 1976). En ambos casos, aunque con enfoques distintos, la protagonista es la mujer. Nuria Vilanova es licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona y ha hecho numerosos cursos de diseño gráfico, Ilustración y fotografía, entre otros. En la obra que presenta, realizada en técnica mixta sobre lienzo, hace una interpretación poética de nueve figuras históricas, como Simonetta Vespucci, Artemisa de Caria, Livia Drusila, Caterina Sforza o Sor Juana Inés de la Cruz, a las que dibuja con un rostro ensimismado y un tanto hierático, y con carnaciones de delicado tono gris, que establecen una especie de simbolismo estático e inconmovible, como si su efigie hubiese quedado inmortalizada en un esquema de belleza atemporal Todas ellas llevan vistosos tocados y su busto va ataviado con elegantes ropajes que aparecen, a veces, envueltos en ráfagas que son como acuosas auras azules y rojizas que pueden leerse como el inevitable paso del tiempo que va dejando su huella; de este modo establece también un contraste entre la serenidad de los rostros y la agitación de las manchas. Lola Saavedra es Licenciada en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid y profesora de Educación Plástica en la Enseñanza Secundaria, tiene obra en diversas e importantes colecciones (Xunta de Galicia, entre otras) y ha recibido varios premios. Presenta doce obras realizadas con técnica mixta, tinta china y collage, en las que se acerca al universo femenino con una mirada rompedora donde la mujer aparece como acróbata, como tañedora de guitarra o como formando parte de un coro; en todos los casos, su figura o su rostro va resaltado por colores vibrantes, anaranjados, rojizos, amarillos intensos y azules. Un ejemplo notorio es el cuadro “Mujer que danza”, en la cual un desnudo femenino aparece como arrebolada entre auras rosadas y azul turquesa. Otro ejemplo de esta vibrante fuerza femenina son las obras “Dúo de percusión I” y “Dúo de percusión II”; en ellas compone una escena protagonizada por una joven de cuerpo totalmente dorado que enarbola unos palillos y otra totalmente vestida de azul que toca un tambor. Hay unas obras que hizo durante el confinamiento de la pandemia: “Mollamia”, donde hay como una cabeza atrapada y “Message in a bottle”, en la que una mano gris extiende un mensaje, como si fuese una llamada de socorro.”El baño, I y II” y Femaile bodies” son dos formas de mostrar las rotundideces del desnudo femenino y un claro ejemplo de su dominio de la anatomía humana; en ello abundan también “Estudio para acróbata aérea” y “Acróbata aérea”, en las que la figura de la protagonista se retuerce en el aire suspendida de largas cuerdas. Pone con ello, L. Saavedra, un vibrante colofón a este tema de la energía femenina, que queda, así, por medio de móviles y agitados trazos, expresada y resaltada con intensidad.