Al 73% de la población le molesta respirar el humo ambiental del tabaco y un 66% estaría a favor de aumentar las restricciones, sin embargo, el 45% de los españoles no fumadores está expuesto al tabaquismo pasivo en terrazas.
Así consta en los resultados preliminares del cuarto ‘Estudio de tabaquismo pasivo en España’ presentado este miércoles, antes del Día Mundial sin Humo (31 de mayo), por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ), que también revela que el 12,5% de los españoles no fumadores está expuesto al tabaquismo pasivo en lugares de ocio cerrados dónde puede haber niños, y pese a las prohibiciones por ley.
La encuesta de Separ fue realizada sobre una muestra de 3.000 entrevistas telefónicas entre población de 16 y 80 años a fin de conocer la prevalencia del tabaquismo pasivo en hogares, lugares de estudio, trabajo y ocio. Según el estudio, en lugares de ocio, como terrazas, el 52% de los no fumadores están expuestos al humo del cigarrillo convencional y un 37% al de los otros productos de tabaco.
Si bien el 73% de los encuestados dice sentirse molesto y un 72% conocer las limitaciones legales vigentes para fumar en lugares públicos, solo un 10% presentó quejas en alguna ocasión por estar expuesto al humo y un solo 5% recibió ayuda o información médica para evitar este humo ambiental.
El tabaquismo pasivo también se dispara en el hogar. El 56% de los fumadores de cigarrillos y el 60% de adictos a nuevos dispositivos fuma en casa, lo que constata que la prevalencia subió en los últimos 13 años, del 8% al 19%.
Cuando se trata de centros de trabajo, el 7% de no fumadores admite respirar humo ambiental en la empresa, siendo la hostelería la que se lleva el porcentaje más alto (16%), seguida de la empresa privada (7%) y la pública (4%).
En cuanto a los nuevos productos, el porcentaje de empleados no fumadores expuestos en el trabajo también es más alto en hostelería (22%), mientras que en la empresa privada y pública el nivel de exposición es igual, 3%.
En los centros educativos, el 7,5% de los españoles no fumadores que estudian están expuestos al tabaquismo pasivo, así como uno de cada diez estudiantes no fumadores.
Otro aspecto que se ha abordado en la jornada es el tabaquismo pasivo en la infancia y antes de nacer. Según el neumólogo y expresidente de Separ Carlos A. Jiménez, el tabaquismo pasivo en el embarazo duplica el riesgo de que los niños puedan morir durante la gestación o en el primer año de vida.
Por su parte, el presidente de Separ, Francisco García Río, destacó que la prevalencia de tabaquismo va en incremento en los últimos años, sobre todo en mujeres y jóvenes y en las nuevas modalidades de tabaco.
En España mueren cada año 63.000 ciudadanos por tabaco y un millar por exposición al tabaquismo indirecto, según datos de un estudio realizado entre 2016 y 2022. García Río instó a trabajar con Sanidad en una estrategia del Sistema Nacional de Salud en enfermedades respiratorias, donde el tabaco ocuparía un lugar especial en prevención y control.
El secretario de Estado, Javier Padilla, que inauguró la jornada, hizo hincapié en que Sanidad “no puede abandonarse” a que las políticas de control de tabaquismo se hagan de la mano de empresas que se quieran lucrar.