El multimillonario y dueño de la red social X, Elon Musk, mantuvo hoy una conversación con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en la que describió a la inteligencia artificial (IA) como "potencialmente la mayor amenaza contra la civilización".
El diálogo entre ambos tuvo lugar en la fábrica de Tesla en Fremont, California, y fue retransmitida en directo por X, previamente conocida como Twitter.
"Queremos asegurarnos de que la tecnología sea algo que beneficie a la humanidad en la mayor medida posible", dijo Musk durante la conversación, que tuvo como eje los peligros del rápido avance de la IA.
"Solo queremos asegurarnos de que estamos guiando las cosas hacia un futuro positivo y no negativo", agregó el empresario.
Por su parte, Netanyahu celebró los aportes de la IA en múltiples áreas como la medicina, la agricultura y la industria pero advirtió también sobre los peligros que conlleva para las democracias, el crimen organizado y los conflictos bélicos y destacó que "se está acabando el tiempo" para hacer frente a estos desafíos.
"La pregunta principal es qué podemos hacer internacionalmente, a nivel global, para contener esta amenaza", señaló el mandatario, quien sugirió la posibilidad de crear un código de ética o de conducta entre países aliados para evitar un "caos asegurado".
El primer ministro comparó además los peligros de complejas herramientas de IA en manos de "malos actores" como Irán con la posibilidad de que estos obtengan armas nucleares, e instó a desarrollar mecanismos globales para disuadirlos y para "vigilar el planeta".
Por otra parte, Musk hizo referencia a las protestas en Israel contra la reforma judicial impulsada por Netanyahu y reveló que los empleados de Tesla, empresa de la cual es consejero delegado, presentaron objeciones a su encuentro con el líder israelí.
El primer ministro defendió su reforma judicial como un intento por "restablecer el equilibrio" entre los tres poderes del Estado, opinó que esta fortalecerá la democracia del país y adelantó que a su regreso a Israel su prioridad será "buscar un consenso" en torno a la polémica legislación.
La reforma, que ha desencadenado un masivo e histórico movimiento de protesta en Israel que se extendió incluso a partes de Estados Unidos, busca otorgar más poder al Ejecutivo en detrimento de la Justicia, cuya independencia se vería profundamente socavada.
El encuentro de hoy entre ambos tuvo lugar poco después de la llegada del primer ministro a Estados Unidos en el marco de una visita diplomática de varios días que incluirá también un discurso frente a la Asamblea General de la ONU en Nueva York el viernes.
En el marco de su presencia en la sede de la ONU, el jefe de Gobierno israelí se reunirá con el presidente estadounidense, Joe Biden, el canciller alemán Olaf Scholz, el presidente turco Recep Tayip Erdogan, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, y también con otros mandatarios internacionales.