Especialistas epidemiológicos del Hospital Clínic, del Hospital Vall d’Hebron en Barcelona y del Hospital Germans Trias i Pujol Can Ruti de Badalona (Barcelona) aseguraron que no ven “alarmante” la llegada a Cataluña de nuevas variantes del coronavirus, conocidas como Flirt.
Según la información de la base de datos genómicos de virus Gisaid, en la comunidad catalana se detectaron 53 casos pertenecientes a las nuevas variantes de Covid: 26 en el Hospital Vall d’Hebron, ocho en el Hospital de Bellvitge (Barcelona), siete en el Clínic Barcelona, ocho en el Hospital Germans Trias i Pujol de Badalona (Barcelona), tres en el Hospital Josep Trueta (Girona) y una en el Hospital Joan XXIII (Tarragona).
La jefa del Servicio de Medicina Preventiva y Epidemiología del Hospital Clínic, Anna Vilella, atribuye la aparición de nuevas variantes a la “evolución natural” del coronavirus, que describe como un virus variable con una alta capacidad de mutación que contribuye a su supervivencia.
Vilella explicó que es previsible que “periódicamente” el virus vaya cambiando para sobrevivir y haya nuevas variantes que resulten más contagiosas porque derivan de mutaciones “suficientemente grandes como para saltarse la respuesta inmunitaria que ha adquirido la población”.
En la misma línea, el responsable de la Unidad de Virus Respiratorios del Hospital Vall d’Hebron, Andrés Anton, afirmó que “lo que está pasando con estas variantes Flirt es lo que ha ido pasando durante toda la pandemia y a lo que nos tienen acostumbrados los diferentes virus respiratorios que no son SARS-CoV-2, como puede ser el virus de la gripe o el virus respiratorio sincitial (VRS)”.
Anton dijo que, aunque hay un pequeño incremento en el número de infectados, “en realidad no tiene un impacto ni en las hospitalizaciones ni en las defunciones” y, según el Sistema d’Informació per a la Vigiláncia d’Infeccions a Catalunya, la incidencia del coronavirus se mantiene baja.
Anton insistió en que hay que afrontar “con tranquilidad” la llegada de las nuevas variantes del virus y tener presente existe una inmunidad adquirida gracias a la vacunación y como consecuencia de la infección natural, de modo que la población inmunocompetente está protegida.
“Tenemos que estar alerta, no bajar la guardia, pero no alertar”, añadió la especialista del Servicio de Enfermedades Infecciosas de Can Ruti, Lourdes Mateu, quien destacó que lo importante es proteger con vacunas a la población vulnerable, ancianos y personas inmunodeprimidas, que es más probable que necesiten hospitalización en caso de infectarse.
Para afrontar las nuevas variantes del virus, los tres especialistas coincidieron en señalar la importancia de recurrir a la vacunación, especialmente en el caso de la población más vulnerable, las personas que viven con pacientes vulnerables y, por supuesto, el personal sanitario. Además, aseguraron que, cuánto más amplia sea la cobertura vacunal de la población, mejor será, en consecuencia, la protección de la población.