El Gobierno escenifica su fractura en el Pleno ante la reforma del solo sí es sí

El Gobierno escenifica su fractura en el Pleno ante la reforma del solo sí es sí
La ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, acompaña a la ministra de Igualdad, Irene Montero, durante la sesión plenaria en el Congreso | Ricardo Rubio (Ep)

El PSOE y Unidas Podemos escenificaron ayer su fractura en el pleno del Congreso ante la reforma de la ley del solo sí es sí, iniciativa socialista apoyada por el Partido Popular (PP) que rompió al bloque de la investidura y que ha generado un agrio debate en el hemiciclo.


“Estamos cansadas de sus peroratas, señorías de Unidas Podemos”, “dejen la hipérbole y hablemos de soluciones, es lo maduro y lo serio. Cuando se trata de cuestiones de tanta relevancia, no importa el con quién, sino el para quién”, manifestó desde la tribuna la portavoz socialista, Andrea Fernández.

 

La soledad de Montero


En la bancada del Gobierno solo hubo ayer dos ministras: la titular de Igualdad, Irene Montero, y la líder de su partido, Unidas Podemos, y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, que escucharon juntas cómo la mayoría del hemiciclo apostaba por elevar las penas de la ley tras más de 700 rebajas de condenas a agresores sexuales.


Los defensores de la reforma socialista subrayaron la necesidad de dar respuesta a la alarma social y al dolor causado a las víctimas y reprocharon a Unidas Podemos sus críticas a los jueces que rebajan condenas.


Frente a ellos, los portavoces que rechazaron la propuesta advirtieron de que elevar las penas de las agresiones sexuales cuando haya violencia o intimidación supone volver “al Código Penal de La Manada”.

 

El perdón del PSOE


“El PSOE asume la responsabilidad de modificar esta ley”; “No está funcionando adecuadamente y por tanto hay que modificarla, hay que ser consecuentes, hay que ser responsables”, manifestó Andrea Fernández tras pedir perdón a las víctimas y reivindicar la “hoja de servicios” de las socialistas en favor del feminismo.


Desde Unidas Podemos, Lucía Muñoz llamó a todas las feministas a “inundar” este 8 de marzo las calles para “decirles alto y claro a los fascistas” que no van a permitir que se les arrebaten sus derechos y “gritar alto y claro que solo sí es sí”.


“Este fue el grito de miles de mujeres en las calles que hoy ustedes traicionan”, advirtió al PSOE, que “le están dando la espalda a todas las mujeres de este país”, destacó Muñoz.


Por su parte, y a pesar de su apoyo a la toma en consideración de la iniciativa socialista, la portavoz del PP, Cuca Gamarra, cargó con dureza contra el Ejecutivo y aseguró que la reforma es “una derogación por el propio Gobierno” de una ley impulsada por él mismo.

 

Enmienda a la totalidad


“Estamos ante una enmienda a la totalidad de Pedro Sánchez a su propia coalición”. Para Gamarra, la única razón por la que el PSOE presentó esta reforma es por la “alarma electoral” y trasladó la “responsabilidad” de los efectos de la ley a “aquellos que con su voto la respaldaron e hicieron que llegara al Boletín Oficial del Estado (BOE)”.


Vox optó por la abstención. Su portavoz, Carla Toscano, apostó por “derogar entera” la ley del solo sí es sí y señaló que el Gobierno “ha perdido toda la autoridad para hablar de las mujeres” ya que las dejaron “más desprotegidas que nunca”. Toscano se dirigió al PP, a quienes llamó “pagafantas” por “comprar toda la basura ideológica de la izquierda”. Se sumaron al sí Ciudadanos, Partido Nacionalista Vasco (PNV), PDeCat y formaciones del grupo mixto como Coalición Canaria y PRC.

 

No bajarán las revisiones


Junto a Unidas Podemos se mantuvieron en el no Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), EH Bildu y la CUP, mientras que JxCAT, Más País y Compromís optaron por la abstención.


Desde ERC, Pilar Valluguera lamentó que “las mujeres no se merecen” la división escenificada por el Gobierno un día antes del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer,  y avisó de que la reforma “no va a parar ninguna revisión de condenas”, aunque salga adelante. 


Bel Pozueta, de Bildu, alertó además de que “acabar con la violencia machista no es tan fácil como imponer penas más altas”.

 

Mejor solución técnica


El PNV se mostró convencido de que es necesario dar respuesta a la “conmoción” y a la “perplejidad” de las víctimas, y su portavoz, Mikel Legarda, apostó por buscar “la mejor solución técnica a un problema real que no entiende de relatos”, más allá de “sectarismos estériles” y debates sobre “cuál es el feminismo verdadero”.


En la misma línea, Sara Giménez (Ciudadanos) defendió tanto la norma como la necesidad de su reforma, por trámite de urgencia.


Mientras, Ana Oramas, de Coalición Canaria, pidió “perdón” por la ley y exigió también que su reforma se apruebe “cuanto antes”.

 

El Gobierno escenifica su fractura en el Pleno ante la reforma del solo sí es sí

Te puede interesar