El presidente del Gobierno regional, Fernando López Miras, consideró que el Ayuntamiento de Murcia fue “lo suficientemente claro y rotundo en cuanto a la transparencia y en cuanto a depurar responsabilidades” respecto a los incendios de las discotecas de la zona de Atalayas.
Por ello, mostró su confianza en cómo está llevando el Consistorio esta situación. “Depurarán responsabilidades”, zanjó en un contacto con los medios al ser preguntado por este asunto.
El presidente autonómico señaló que este miércoles terminaron los tres días de luto oficial “y como el resto de España, la Región sigue conmocionada por la tragedia”. Así, recordó que él estuvo “con todas y cada una de las familias y de los conocidos de las víctimas”, al tiempo que se reunió estos días con el cónsul de Colombia y la de Ecuador, y habló con el embajador de Nicaragua para transmitirles su pésame y poner a disposición de las víctimas y sus allegados “todos los recursos que tiene la comunidad para acompañarles en cualquier cuestión que fuera necesaria”. A partir de ahí, puntualizó que se ha abierto una investigación judicial que el Gobierno regional “respeta”.
Por su parte, el Ayuntamiento de Murcia comenzó ayer una ronda de inspecciones en locales de ocio nocturno de gran aforo en las zonas de Atalayas y Mariano de Rojas que tienen órdenes de cierre para, en el caso de que continúen abiertos como ocurría con las discotecas incendiadas, proceder a su precinto. Así lo dijo ayer en rueda de prensa la vicealcaldesa, Rebeca Pérez, que no especificó cuántos locales tienen una orden municipal de cese de actividad, si bien reconoció que éstas afectan a todo tipo de negocios y “con una casuística diversa”, no solo al ocio nocturno.
Además, Pérez dijo desconocer por qué el expediente de cierre de Teatre no siguió “el avance lógico”, que habría sido el de precintar el local tras la visita que un inspector hizo en octubre de 2022, e insistió en que el objetivo es ahora determinar si hay otros expedientes en la misma situación, con órdenes de cierre que no han llegado a ejecutarse.
Las familias de siete de los trece fallecidos en el incendio de las discotecas Teatre y Fonda Milagros solicitaron la repatriación de los cuerpos a sus países de origen.
Así lo explicó ayer la concejala de Servicios Sociales, Pilar Torres, que hizo un balance de las actuaciones efectuadas con las familias afectadas, y que estuvieron centradas en el apoyo y la atención psicosocial.
Ayer, el juzgado de instrucción número 3 de Murcia comenzó a cursar las autorizaciones para que los familiares puedan llevarse del Instituto de Medicina Legal los cuerpos de sus seres queridos.