Máxima y Guillermo de Holanda, Navidad en la Patagonia tras su paso por Madrid

Los reyes de Países Bajos y sus tres hijas Amalia, Alexia y Ariane han estado en La Patagonia con la familia Zorreguieta
Máxima y Guillermo de Holanda, Navidad en la Patagonia tras su paso por Madrid
Los monarcas Guillermo y Máxima posan, en una estampa navideña, con sus hijas, Ariane, Amalia y Alexia, y su perro Mambo | Aec

Cumpliendo con la tradición que endulza su Navidad todos los años, la reina de Países Bajos ha regresado a su tierra natal para disfrutar de las fiestas. Según ha trascendido, la primera en llegar fue Máxima de Holanda, pero no ha estado sola. Tanto su marido como sus tres hijas la han acompañado en esta aventura.


Llegaron en vuelos diferentes e intentaron pasar inadvertidos, pero van rodeados de un equipo de seguridad muy potente y no han podido evitar las miradas de los curiosos. Hay que recordar que la consorte todavía tiene familia en Argentina, por eso siempre que su agenda se lo permite hace una escapada y vuelve a conectar con sus orígenes.


La madre de Máxima de Holanda se llama Carmen Cerruti y vive en Buenos Aires. Por otro lado está su hermano Martín, quien está asentado en La Patagonia. Es justo allí donde ha viajado la familia real holandesa. La reina estaba esperando en el aeropuerto internacional de Ezeiza a que llegasen su marido y sus hijas: las princesas Amalia, Alexia y Ariane. Aterrizaron en un vuelo regular de KLM y seguidamente se metieron en un Bombardier Global 5000, un avión privado con capacidad para 13 pasajeros. Después de un viaje marcado por la ilusión llegaron a un lujoso hotel que pertenece a la familia de Máxima, los Zorreguieta.


El diario ‘Gente’ ha explicado cómo fue la llegada de los reyes de Holanda a Argentina: “Aunque trataron de pasar desapercibidos, su aterrizaje acabó despertando la curiosidad entre los viajeros”. El citado medio aseguró que la Reina no estaba esperando sola al resto de la familia real, estaba acompañada de sus guardaespaldas y de unos vehículos cuyo objetivo era trasladarles al destino final.


“Les esperaban tres furgonetas y como dato curioso el soberano de la dinastía Orange-Nassau fue el encargado de conducir una de ellas. En el asiento del copiloto estaba su esposa y detrás las jóvenes royals. Fueron entonces captados por algunas cámaras y fotógrafos de la prensa, a quienes Máxima les lanzó un saludo con la mano”. Los reyes y las princesas han disfrutado de la Navidad en Villa La Angostura, ciudad en la que Martín Zorreguieta, el hermano más famoso de Máxima, ha creado una vida marcada por el lujo y la exclusividad.


A pesar de que suelen desplazarse a Argentina para disfrutar de las fechas más familiares, tanto Guillermo como Máxima de Holanda no se olvidan del país que están reinando. Esa es la razón por la que enviaron una felicitación navideña a su querido pueblo. El monarca protagonizó un discurso que se emitió el día 24, cuando el ya estaba en La Patagonia, para confirmar el amor que el soberano hacia su país. 

Máxima y Guillermo de Holanda, Navidad en la Patagonia tras su paso por Madrid

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