Siete comunidades se plantean seguir los pasos de Galicia y estudiarán regular la venta de bebidas energéticas a los menores de edad, un sector de la población que, según el Ministerio de Sanidad y la Asociación Española de Pediatría, no debería consumir este tipo de productos.
Aragón, Baleares, Castilla-La Mancha, Navarra y el País Vasco son las autonomías en las que sus gobiernos regionales prevén estudiar la regulación de estas bebidas, aunque hay comunidades como Castilla y León y la Comunidad Valenciana donde ya se comenzó a abordar esta cuestión a través de análisis. Estas dos últimas ya estudian si prohíben la venta de bebidas energéticas a menores de edad en la línea de lo que anunció la Xunta de Galicia.
Según el consejero de Sanidad de Castilla y León, Alejandro Vázquez, este es un asunto que “hay que estudiar bien” porque “tiene muchos componentes”, por lo que el Ejecutivo regional adoptará una decisión una vez que se analicen “todas las variables”. En la Comunidad Valenciana, la adicción a las bebidas energéticas afecta al 45% de los jóvenes. Allí, la Oficina Autonómica de Salud Mental y Adicciones ya está llevando a cabo un “estudio sensato, reflexivo y sereno” sobre esta problemática “con el ánimo de hacer un abordaje que pueda resolverlo”.
Además, el gobierno de la Generalitat valenciana solicitará al Ministerio de Sanidad abordar en un Consejo Interterritorial el problema de adicción a las bebidas energéticas. Fuentes del Ministerio informaron de que la competencia la tiene la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, que depende del Ministerio de Consumo. “Esto no significa que nosotros no estamos a favor de limitar el acceso y el consumo de los menores a estas bebidas, tal y como ya propusimos en un documento de recomendaciones”, indicaron.