El Ayuntamiento tiene previsto iniciar hoy la prometida reforma del mercado de San Agustín. El proyecto, que fue presentado en septiembre de 2013, divide los trabajos en tres fases. La primera de ellas, que dará comienzo esta tarde, se centrará en la mejora de la accesibilidad en la plaza de abastos con la instalación de dos ascensores panorámicos dentro del edificio.
Los trabajos durarán tres meses y, según la concejala de Empleo y Empresa, Luisa Cid, no afectarán a la actividad diaria de San Agustín ya que todas las tareas se acometerán por la tarde. El proyecto tiene un presupuesto de 150.000 euros. Los elevadores panorámicos servirán, en palabras de Luisa Cid, para disfrutar de la cúpula del edificio diseñado por los municipales Santiago Rey Pedreira y Antonio Tenreiro en 1932. Para su instalación será necesario eliminar los obradores ubicados en la parte alta del mercado, ahora en desuso.
El gobierno local aprovechará la actuación para acometer la adecuación de las cortinas técnicas de la plaza de abastos, una de las más singulares de la ciudad. Cid insistió en que los trabajos responden a las necesidades de los placeros del centro, que desde hace años reclaman una actuación en el edificio.
usos hosteleros
Las dos siguientes fases que forman parte del proyecto de reforma de San Agustín podrían invertir su orden. En un principio, Cid había previsto acometer en una segunda fase la reforma de los puestos de la plaza y dejar para el final la búsqueda una solución para habilitar los usos hosteleros en la parte alta del mercado.
Pero según Luisa Cid es posible que se acometa primero la búsqueda de una solución para la segunda planta, ya que ese es el deseo de los placeros de San Agustín.
La fórmula no está definida. El Ayuntamiento siempre dijo que quería convertir el céntrico mercado coruñés en una especie de Boquería, con puestos hosteleros en los que los visitantes pudiesen degustar los productos que se venden en el mercado. En ese sentido, Cid considera que la instalación de los ascensores panorámicos funcionarán como un aliciente para impulsar el uso hostelero de la parte alta del mercado.
Mientras no se toma una decisión sobre el futuro de este espacio, la Concejalía de Empleo y Empresa seguirá ofreciendo la primera planta de San Agustín como un recinto para organizar ferias gastronómicas itinerantes.
La idea de abrir el mercado a los locales de hostelería lleva años sobre la mesa de los responsables municipales. El primero en intentarlo fue el BNG, durante su etapa en el bipartito, pero la empresa a la que le había encargado las obras quebró, con la consiguiente parálisis de los trabajos. Con el PP, la idea siempre estuvo ahí, pero nunca se concretaron los planes.