Procesadas una mujer y su hija abogada por expoliar a una pariente senil 1,6 millones de su patrimonio

Tenía un patrimonio millonario pero ella misma vivía prácticamente en la miseria. Al revés que su sobrina nieta, que el próximo martes está llamada a comparecer junto a su hija ante un tribunal de la Audiencia Provincial, acusadas ambas de haberse enriquecido a costa del dinero de su pariente, anciana y aquejada de demencia senil.

Fueron, según detalla la Fiscalía en su escrito de acusación, algo más de 1,6 millones de euros lo que las dos mujeres incorporaron a su patrimonio a través de las cuentas, los bienes inmuebles y las acciones de la víctima durante el último año de su vida. Por el modo en que, según entiende esta parte, se aprovecharon de la debilidad de la anciana para enriquecerse, se enfrentan a peticiones de condena que podrían enviarlas seis años a la cárcel y costarles multas de 5.500 euros por un delito continuado de estafa o bien de apropiación indebida que, de constatarse, también las obligaría a devolver la totalidad del dinero a los herederos.

Las acusadas entraron en la vida de la víctima, según hace constar el fiscal, en enero de 2003, fecha en la que el juzgado incoó una demanda de incapacitación de la anciana y se nombró a la sobrina nieta como su defensora judicial. En los meses anteriores, los servicios sociales municipales ya habían tenido conocimiento de la “precariedad” en la que vivía la mujer, en una vivienda que carecía de luz eléctrica y prácticamente de muebles, pese a que todo el edificio era de su propiedad.

También, y a tenor de lo que indica la Fiscalía en su escrito, la mujer presentaba un importante deterioro físico, descuidaba su alimentación e higiene personal. De hecho, el Ayuntamiento había solicitado en septiembre de 2002 autorización judicial para internar a la mujer en un centro psiquiátrico, después de que los vecinos alertaran de su conducta y la Policía la encontrara en varias ocasiones acostada en el portal o deambulando desorientada por la calle.

El escrito de calificación señala que desde esa fecha, la sobrina nieta, apoyada en su hija, abogada de profesión, se las ingenió para ganarse la confianza de la anciana y lograr que la autorizase para gestionar su dinero para, de ese modo, ir engrosando sus propias cuentas a costa de las de su familiar. Hasta el fallecimiento de la perjudicada, llegó a vender alguno de sus pisos, se hizo con el valor de todos sus activos y canceló otras cuentas, después de vaciarlas.

Procesadas una mujer y su hija abogada por expoliar a una pariente senil 1,6 millones de su patrimonio

Te puede interesar