El Gobierno local espera tener lista en un par de meses la modificación del reglamento de las escuelas infantiles municipales que permitirá que la educación sea gratuita para niños de entre cero y tres años.
Esta es una de las medidas que el Partido Socialista y la Marea incluyeron en el acuerdo que permitió la formación de gobierno y entrará en vigencia el próximo curso escolar.
Ambas partes dieron ayer los pasos iniciales que permitirán esta modificación, que en cualquier caso tendrá que ser aprobada por el pleno.
Después de la toma de contacto de ayer se espera entrar en profundidad en el asunto a lo largo de la semana que viene para que pueda ir a pleno en febrero para su aprobación inicial.
Esta medida beneficiará a cerca de los 830 niños que asisten a alguno de los nueve centros que conforman la red de escuelas infantiles municipales. Además de la sintonía entre ambas formaciones, el Gobierno local incluyó en el presupuesto una partida de 489.000 euros, que es el coste que tendrá para las arcas municipales esta actuación.
Con la implantación de este cambio en el reglamento se introducirá la necesidad de primar los criterios de renta “pensando nas familias que teñen menos recursos”, explicó José Manuel Lage, portavoz municipal, y uno de los representantes del PSOE en la reunión junto al concejal del área educativa, Jesús Celemín.
“A educación de cero a tres anos é moi relevante e debe ser de calidade”, explicó el portavoz municipal, quien expuso que esta medida es un “claro exemplo” de las políticas sociales que defiende el Gobierno local.
La portavoz de la Marea Atlántica, María García, aseguró que esta medida que ya planteó esta formación durante el pasado mandato es “absolutamente fundamental” y destacó “o traballo feito” anteriormente.
Desde esta formación expusieron que el asunto requiere de “premura” para que la modificación pueda estar disponible para el próximo curso.
Por su parte, Silvia Cameán, concejala encargada del área educativa por parte de la Marea, destacó aspectos como la necesidad de introducir criterios sociales para que se beneficien “as familias que máis o necesiten” y apostó por poner en valor la aportación a nivel formativo de estos centros. Además, defendió que es necesario que los valores en igualdad, medio ambiente y el fomento del gallego se conviertan en “sinal de identidade” de estas escuelas, para las que también pide mejoras en las condiciones laborales de sus trabajadoras.
La principal diferencia entre ambas formaciones reside en el ámbito de la gestión de estos centros, aunque esto se tratará más adelante, después de que se garantice la modificación del reglamento. El Ayuntamiento apuesta por seguir con el modelo actual, mientras que la Marea habla de gestión directa o a través de entidades sin ánimo de lucro.