El consejero de Pescanova Alfonso Paz Andrade ha defendido hoy en la Audiencia Nacional su distanciamiento del expresidente de la empresa Manuel Fernández de Sousa y de su gestión durante los últimos 5 años, además de declararse "perjudicado" y "sorprendido" por la situación real de la pesquera.
Paz Andrade ha asegurado ante el juez Pablo Ruz que, desde 2007, cuando cesó como ejecutivo de Pescanova, "se apartó del día a día" de la empresa, según han declarado a la prensa fuentes de su defensa.
El consejero está imputado por presuntos delitos de falseamiento de información económico-financiera, falseamiento de cuentas anuales, uso de información relevante, estafa y un delito continuado de falsedad en documento mercantil.
Hoy ha afirmado, según la misma fuente, que su conocimiento de la marcha de la empresa era "exclusivamente como un consejero no ejecutivo de la misma, como los demás que aquí (en referencia al caso) están como perjudicados y como un perjudicado más".
El abogado Joaquín Yvancos, que representa a un grupo de accionistas minoritarios que se han querellado contra Pescanova, ha corroborado que, en su declaración ante la Audiencia Nacional, Paz Andrade ha mostrado "grave sorpresa" por la gestión de Sousa y un "gran distanciamiento".
Según Yvancos, Paz Andrade ha señalado que "él representaba la oposición en el Consejo" y le comunicaban cualquier reunión de la Junta "por la secretaria", mientras que a los demás les transmitía esa información el entonces presidente.
Respecto a la venta de acciones días antes de que Pescanova comunicara a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su desfase patrimonial -ha indicado Yvancos-, Paz Andrade ha justificado que se deshizo de ellas para pagar un crédito, porque le exigió su cancelación anticipada Novacaixagalicia (tras la fusión de cajas gallegas que la constituyeron).
Tras esa fusión bancaria, la entidad obliga a cancelar los préstamos.
Según la misma fuente, Paz Andrade ha manifestado que él estaba en contra de la gestión de "su compañero de fundación" y "no creía en la gran aventura" que era la inversión en acuicultura, distinta a la actividad de "toda la vida" que era la pesca extractiva.
Y ha insistido en que él no ha estado informado en los últimos años y no ha tenido relación con el Consejo.
En cuanto a su acuerdo a la hora de firmar la contabilidad, según Yvancos, Paz Andrade ha dicho que la aceptaba porque era auditor interno y "el auditor externo le decía que todo estaba bien".
Ha justificado su permanencia en la empresa porque la habían fundado su abuela y su padre, y le había dedicado más de treinta años, y más adelante vio "con gran sorpresa por la prensa" todo lo que se estaba descubriendo sobre Pescanova, según ha detallado Yvancos.
Yvancos ha admitido haber creído el testimonio de Paz Andrade desmarcándose de Sousa y la desconfianza en las inversiones en una actividad nueva como la acuicultura, con un "período de maduración de 15 o 20 años": "Los que inviertan aprenderán de los errores de Pescanova en sus piscifactorías".
La declaración prevista para hoy de otro consejero imputado, José Antonio Pérez Nievas, ha sido aplazada a mañana.
El jueves 17 de octubre también declarará el imputado Fernando Fernández de Sousa, pero se suspenden sin fecha las comparecencias ante la Audiencia Nacional de otros tres imputados por el caso Pescanova: Joaquín Viña, Antonio Taboas y Alfredo López.