Cada día, la oficina de rehabilitación recibe una media de cinco peticiones para instalar ascensores en los edificios de la ciudad que carecen de ellos. Se trata de uno de los programas por los que más ha apostado el Ayuntamiento desde la aprobación en 2011 de la nueva ordenanza de rehabilitación, en la que se incluyen ayudas de hasta el 50% para sufragar la colocación de elevadores.
El plazo para demandar estas ayudas se abrió el pasado de 2 de enero y finalizará el próximo viernes. Durante este primer mes abierto al público, el gobierno local recibió 160 demandas, aunque, por la experiencia de otras años, aseguran que esta cifra se multiplicará durante las últimas semanas antes de que se cierre el plazo para pedir las ayudas. De hecho, en el estreno del programa en el 2012, el Ayuntamiento recibió el primer mes de apertura del plazo 65 peticiones, y lo cerró con más de 4.000 expedientes abiertos.
Para financiar el programa, la concejalía de Martín Fernández Prado habilitó una bolsa dotada con un millón de euros. Se trata de la cifra necesaria, según explican en la administración municipal, para poder cubrir los expedientes que el departamento de rehabilitación calcula que podrá tramitar este año. Aunque no es la primera vez que el presupuesto para las ayudas a rehabilitación se quedan cortas debido a la alta demanda de las mismas.
El plan superó todas las expectativas en su primer año en vigor, en 2012, y el gobierno local se vio obligado a aprobar un modificativo de crédito para sufragar las ayudas a la instalación de ascensores.
Para 2013, el Ayuntamiento decidió incluir desde el principio una partida de 900.000 euros para cubrir este programa. En los presupuestos de este año, la consignación para la colocación de ascensores se elevó un 11%, hasta alcanzar el millón de euros.
Cada vecino podrá la posibilidad de obtener una subvención máxima de 5.000 euros. La normativa concede, además de las ayudas, una serie de derechos a la administración local para evitar que se frene su colocación en caso de que una comunidad de propietarios quiera sacarla adelante. Por ejemplo, con la ordenanza, que se aprobó en noviembre de 2011, el gobierno local puede expropiar suelo de los locales en caso de que no exista acuerdo entre los diferentes propietarios de un mismo edificio.
Además, otro de los éxitos del texto es el incremento de las subvenciones, que pasaron de cubrir el 10% de los gastos a alcanzar el 50% del precio final. De esta forma, los coruñeses tienen a percibir hasta 5.000 euros por vivienda frente a los 1.500 euros que fijaba la normativa anterior a 2011.
beneficiados
El Ayuntamiento asegura que se han beneficiado del plan para la instalación de ascensores más de 5.700 coruñeses desde el inicio del programa.
De acuerdo con las cifras aportadas por el gobierno local en la apertura de la nueva convocatoria, hasta el momento el programa afectó a 2.100 viviendas de 180 edificios repartidos por los diferentes barrios.