Tras quedar terceros en el campeonato nacional, los coruñeses Juan Martínez, Álvaro Ballón y Jacobo Taboada, del colegio Compañía de María, pelearán por ganar en la Olimpiada mundial de Robótica en Tailandia los días 16, 17 y 18.
Hace unos meses, estos estudiantes de segundo de la ESO daban por perdido su sueño, ya que no encontraban la forma de financiar el viaje al país e inscribirse en el campeonato, pero Repsol ha decidido correr con los gastos, por lo que ahora se esforzarán “al máximo” para presentar el mejor proyecto y volver con el trofeo a la ciudad, gracias a la ayuda de la multinacional.
Este equipo ha decidido llamarse Ga-Legos, por su procedencia y por el material con el que han realizado el robot, piezas de Lego. Es un proyecto del que también realizaron los motores y la programación y está basado en el medio ambiente, ya que pretende reducir la emisión de CO2 a la atmósfera mediante la plantación de árboles.
“En robótica no hay edades. Si se ponen las pilas pueden llegar al máximo nivel en poco tiempo”, decía ayer el profesor de estos estudiantes, Ángel Fernández, tras hacer una demostración de lo que han conseguido hasta el momento con este proyecto.
Aunque este docente dice que deben “tener los pies en la Tierra” ante el gran campeonato que les espera, ya que competirán con más de 200 equipos, asegura estar “orgulloso” del trabajo que están haciendo y “pase lo que pase, van a aprender cosas, es algo que van a recordar siempre”. Jacobo, Álvaro y Juan dicen estar algo “nerviosos” ante el viaje que les espera, ya que son “muchos contrincantes”, pero aseguran: “Vamos a hacer lo que podamos”.
El director de la refinería de Repsol en A Coruña, Javier Sancho, afirma que actividades como esta “están en el ADN de la compañía”, por eso no han dudado en “participar en el sueño de estos estudiantes y de la gran experiencia que van a tener”. Además, indica que esperan “impulsar el interés de los jóvenes por asignaturas tecnológicas con iniciativas como esta”.
Desde al AMPA del centro, comentan que llevan años con la actividad de Robótica y Programación y los alumnos “han mejorado mucho”, pero haberse clasificado para el mundial “es algo totalmente inesperado”. Hasta el momento, Juan, Álvaro y Jacobo cumplirán su sueño de ir hasta allí, aunque son conscientes de la dificultad del reto, pero lo que es seguro es que intentarán dejar a A Coruña en lo más alto.