“A un vecino le llueve dentro de casa”, lamenta el presidente de la asociación de vecinos de Mesón da Auga, Diego Calviño. La urbanización fue proyectada por la Xunta y una vez que los inquilinos empezaron a ocupar sus casas, se percataron de que había un buen número de defectos de construcción. Los retrasos en el inicio de las obras prometidas en abril por Xestur ha llevado a los afectados a concentrarse a la entrada de la urbanización para exigir que el Gobierno gallego cumpla.

En este sentido, Calviño explica que en abril les aseguraron que “en breve” se comenzaría con los trabajos. En concreto, les señalaban que “había 30 viviendas que eran las más urgentes” y que, a mayores se iniciaría una serie de “chapucillas” menores. Pero, “los meses pasan” y, a pesar de que se han puesto en contacto en varias ocasiones con la entidad autonómica, siguen sin tener una fecha exacta.

desperfectos

La urbanización está compuesta por 110 viviendas unifamiliares y tres edificios. Como explica el presidente de la asociación, después de la última reunión, por el residencial se pasó personal de Xestur para hacer “pequeñísimas reparaciones”, que poco tenían que ver con lo que les habían prometido desde el citado organismo gallego.

La Xunta aseguraba en abril que iniciaría las obras en las 30 casas más dañadas

Otro de los puntos que lamentan desde la asociación es que “hace dos años presentaron un proyecto muy similar” al último y “no se hace nada”. Recuerdan que muchas viviendas están afectadas por la condensación y las humedades. “En algunas los baños son casi inutilizables”, expone Calviño.

A estos desperfectos se suman otros que se han ido comprobando con el tiempo. “Las casas han sido construidas con materiales de mala calidad” e incluso padecen goteras.

“La gente está desesperada”, asegura el presidente de la entidad vecinal que reprocha los retrasos de la Xunta porque “ahora es verano y no trabajan y después llegará otoño y otra vez las lluvias”, con los que los problemas que a diario sufren los residentes se verán incrementados.

Por último, también expone el portavoz de los afectados que la concentración de ayer será la primera de las “medidas de presión” que tienen pensado poner en marcha para reclamar una solución a estos problemas.