El Liceo comenzará el sábado la OK Liga en la pista de todo un histórico del hockey catalán, el Igualada. Histórico por su palmarés, pero también por su edad, ya que el club de Anoia cumple en este atípico 2020 setenta años, tras su fundación en 1950. Muchos fueron los duelos con el conjunto verdiblanco, sobre todo en los años noventa, cuando los arlequinados consiguieron la mayoría de sus títulos (los más importantes son 5 Ligas, 2 Copas del Rey, 6 Copas de Europa y 5 Copas Continentales).
Los tiempos han cambiado, y el Igualada espera poderse adaptar a la baja de uno de sus pilares de la temporada pasada, Jordi Méndez, ahora en el Amatori Lodi italiano. Pero mantiene a jugadores de calidad contrastada como el portero internacional Elagi Deitg o su capitán, Ton Baliu. César Vives, Sergi Pla o Aleix Marimón son otros de los hombres fuertes de la plantilla que entrena Cesc Linares.
En la pretemporada ya ha dejado claras sus intenciones: Superar a los equipos que se supone que son de su nivel, y conseguir el mayor número de puntos posibles con los cuatro ‘grandes’ de la OK Liga (Barcelona, Liceo, Reus y Noia).
Ha disputado la Liga Catalana, en la que llegó hasta las semifinales. En octavos, superó a doble partido al Lleida (4-3 y 2-2). En cuartos, ya dentro de la final a ocho de Vic, se impuso al Calafell (4-2) y en la penúltima ronda perdió con el Noia (3-2). También recientemente ha disputado un amistoso con el Reus, ante el que cayó por 1-3.
El Igualada va a disputar esta temporada la WS Europe Cup (antigua Copa CERS), siendo su primer rival el Uttigen alemán.
Y este fin de semana intentará sorprender al Liceo, si bien no será lo mismo en un Les Comes vacío.