Existe un movimiento a nivel nacional www.sugarfree.io, que invita a pintar el mapa de España de puntos, que son farmacias donde la homeopatía no entra por la puerta con la convicción de que se trata de una pseudoterapia ineficaz, peligrosa y sin base científica, un fraude –dicen– contra el que llevan años luchando. En concreto, solo dos negocios en la ciudad se niegan a venderla. Uno es el de Ronda 58, donde Inmaculada Díaz es rotunda: “No sirve para nada porque cogen un litro de agua donde diluyen algo, desde una uña de gato a un trozo del muro de Berlín, utilizan el método de agitación o sucusión, de ahí cogen un mililitro que vuelven a diluir en otro litro y así otras reducciones más”. Una de las más comunes, cuenta, es la Arnica Montana 30CH, “una burrada”. La farmacéutica lo tiene claro: “Da mucha pasta y esta es la única razón por la que se vende, pero, en realidad, bebes agua”.
Por eso, venera las distintas iniciativas que están realizándose a través de las redes sociales como la de farmaciencia, que es a nivel nacional intentando “sacar la homeopatía de la farmacia”. La profesional la compara con las pulseras magnéticas. En parte por el beneficio que dan y en parte también cree que se vende por ignorancia: “No saben lo que es, me niego a pensar que son estafadores”. Por otro lado, el paciente pica, asegura, y prueba. Porque no quieren perder otro campo, la mayoría dedican espacio a la homeopatía, pero para Inmaculada Díaz, “la ética tiene que estar por encima de eso” y en su caso, no es partícipe de la tarta de una práctica que no comparte.
En la Segunda Fase de Elviña, los usuarios de la página web sitúan a la segunda, la farmacia Vidal Piñeiro. En efecto, la botica no comulga con la homeopatía desde el principio y aseguran que la gente apenas pide esta clase de productos. Hablan de que tuvieron un boom, pero en su caso, no hay debate. La siguiente “free”, advierte el rincón internauta, está en Santa Cruz.