La tranquilidad propia de una mañana de domingo se vio truncada el domingo en la calle de Juana de Vega, en pleno centro de la ciudad, donde estalló una pelea en la que se vieron involucrados tres hombres, y que obligó a acudir al lugar de los hechos hasta a ocho patrullas de la Policía Local y Nacional, en medio de la expectación general.
No hubo ningún detenido, pero los agentes tuvieron que esforzarse para calmar los ánimos. Según parece, los implicados estaban intoxicados, y las fuentes consultadas apuntan a que son habituales de la zona, sujetos en situación de precariedad que muchas veces se reúnen en la plaza de Pontevedra. Después de unos veinte minutos, los agentes abandonaron el lugar de los hechos, pero la situación quedó lejos de concluir.
En efecto, uno de los implicados aprovechó la ausencia de los agentes para dar rienda suelta a su rabia haciéndose con los contenedores que se encontraban en la misma calle y volcándolos en medio de la calzada ante el pasmo de los testigos, que observaban como el hombre estaba fuera de sí. Una vez consiguió calmarse, abandonó el lugar de los hechos, dejando allí mismo los contenedores, que fueron retirados para permitir el tráfico.