Miku Fedor, autor del único tanto del Deportivo y de la victoria ante el Marino de Luanco, es el actual pichichi con cuatro dianas, y valoró positivamente el volver a marcar.
1. Goles que refuerzan el ánimo
“A nivel individual a cualquier jugador un gol siempre le refuerza, reafirma el trabajo durante la semana, a nivel particular, mientas las lesiones me respeten, intentaré dar el máximo por los objetivos colectivos, hoy (por ayer) tocó marcar”, comentó durante su rueda de prensa telemática.
2. Complicado a nivel mental
El delantero venezolano admitió que el equipo tuvo que sobreponerse al palo que supuso el no poder jugar para buscar el ascenso a Segunda y ensalzó la figura de Álex Bergantiños en ese proceso de ayuda al grupo.
“Ha sido difícil, porque la semana pasada fue un chasco muy grande, los resultados no nos favorecieron, pero el míster fue muy incisivo, de que la gente no se desconectara. Jugamos por un objetivo que no era el que esperábamos, y ahora el objetivo está a mano, no nos podemos despertar tarde, como hicimos en la primera fase y luego no nos llegó. El partido a nivel mental era muy importante. Álex como capitán estuvo intentando que la gente no se relajara. Durante las semana lo ves en los ejercicios, de cara al partido del domingo, cogiendo a la gente joven, dándoles un consejo, el cómo posicionarse. Hoy (por ayer) en el descanso, incluso durante el partido, habla de movimientos, el ejercer como un segundo entrenador y eso es siempre de valorar. Está comprometido al cien por cien por la causa”, resumió el ‘nueve’.
“El equipo está ganando, gracias a Dios puede hacer un gol, hay jugadores que entran y no se nota, y veo a la gente de forma colectiva bastante enchufada”, añadió.
3. Una semana más cerca de la meta
Para él, el Deportivo tiene que ver este partido como un paso más para llegar a la meta, que no es otra que ocupar una de las dos plazas que dan acceso a la primera RFEF. Un mal menor para una temporada muy complicada y en la que el Depor no ha conseguido el objetivo fundamental, que era el poder optar a regresar a Segunda división.
“La lectura es esa, todo lo que sea recortar semanas y sumar de tres nos acerca a nuestro objetivo inmediato, la Primera Federación, que creo que es lo que se va a llamar, así. El equipo tiene que aspirar a cosas importantes, que es lo que tiene que hacer. La semana que viene tenemos un partido muy ‘jodido’, en campo artificial (ante el Langreo). Tenemos que ir allí con humildad, con el mono de trabajo, correr y sudar, y el partido lo vamos a decantar cuando tengamos ese nivel de compromiso”, afirmó el delantero.
4. Menor proyección ofensiva
El cuadro blanquiazul tuvo menos ocasiones que en otros partidos ante un rival que se cerró bastante, como una de las razones, aunque Miku también admitió que el aspecto mental podía haber pesado en cierta medida.
“Creo que va más por lo segundo, el bajón anímico y una defensa con cinco atrás a esperarnos. Teníamos que tener mas paciencia a la hora de circular el balón y más velocidad de tres cuartos para adelante para ser diferenciales en esa parte del campo. Nos faltó control y el equipo contrario llegaba a las ayudas y era difícil para los compañeros encontrar en defensas tan cerradas los espacios”, indicó.
Todo eso desembocó en que “prácticamente no tiramos a portería. Nos tiene que servir de lección, por la entidad y la historia y el escudo los equipos vienen acá con esa premisa (de esperarlos atrás) y nos paso durante la temporada y no supimos afrontarlo. En estos partidos puede ocurrir esto y tenemos que estar preparados para ello”, pidió.
Asimismo, aclaró que Rubén de la Barrera no asignó quien tiene que tirar los penaltis pero él asumía esa responsabilidad. “El que sienta con confianza. Yo cuando estoy jugando agarro esa responsabilidad, no la rehuyo, “dijo el ariete venezolano.