El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, anunciaba ayer los nuevos pasos en el proceso de desescalada, que afectarán a las residencias, a la hostelería y al toque de queda, que mañana pasará a las 23.00 horas, en lugar de a las 22.00. Esta medida afectará a un subsector hostelero, el de la restauración, que podrá servir cenas hasta esa misma hora, mientras el resto de establecimientos seguirá cerrando a las 21.00 horas. La primera estimación del sector es positiva, al ver que muchos compañeros podrán retomar parte de su actividad.
Se trata de una cuestión que fue consensuada, tal y como dejaba entrever Núñez Feijóo durante su intervención de ayer. Del mismo modo lo apuntaba el presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de A Coruña, Héctor Cañete, que explicaba que las opciones eran seguir igual o que los locales de restauración pudiesen ofrecer cenas hasta las 23.00 horas. “Optamos por ver el vaso medio lleno”, indicaba el presidente de la entidad hostelera, que añadía: “Preferimos que vaya abriendo un subsector a que todos sigamos cerrados”, en relación a que los locales que no tengan licencia de restauración seguirán como hasta ahora, abriendo únicamente hasta las 21.00 horas, en el caso de A Coruña, limitados al 75% en exteriores y al 50% en interiores.
Las condiciones para esa apertura hasta las 23.00 horas son tres, tal y como explicó el líder del Ejecutivo gallego: que los locales tengan la licencia de restauración, que las cenas sean con cita previa y bajo un registro de clientes (con el fin de poder seguir los posibles casos de covid que se dieran) y que se instalen medidores de dióxido de carbono (para tener controlada la calidad del aire en todo momento).
Acerca de este último punto, explicaba ayer Cañete que no debería ser un impedimento, ya que el “medidor estándar puede costar en torno a unos 50 o 60 euros” y solo será obligatorio para reabrir hasta la hora citada. Aunque la extensión de horarios entra en vigor mañana, la obligatoriedad de instalar medidores para servir cenas hasta las 23:00 horas no se hará efectriva hasta el día 23.
Compañerismo y futuro
El presidente de los hosteleros coruñeses afirmaba ayer que las reacciones que ha ido teniendo en las últimas horas son “muy positivas”, sobre todo las del subsector afectado. Serán muchos los locales de la ciudad que desde mañana puedan servir cenas de nuevo, pero Cañete matizaba que “con que solo fuese uno el que pudiese abrir, ya sería positivo para el sector”.
De cara a los siguientes pasos de la desescalada, al igual que Núñez Feijóo durante la mañana, apelaba a tener muy en cuenta la evolución de los casos activos, ya que existe cierto temor a una posible cuarta ola, que ya afecta a algunas comunidades del Estado. No obstante, apuestan a que, si la situación continúa siendo favorable, el resto de compañeros se puedan unir a estas nuevas ampliaciones de horario.
A pesar de esto, la incorporación del resto de locales estará ligada a la evolución sanitaria y probablemente haya que esperar unas semanas.
Estas fueron algunas de las resoluciones del comité clínico de la Xunta, que también elevó las restricciones de Cambre, hasta el nivel medio, tras pasar los 150 casos por cada 100.000 habitantes.
Mientras tanto, Carral permanecerá en el nivel alto de restricciones, al estar por encima de los 250 casos de coronavirus por cada 100.000 habitantes.