En torno a las 15.00 horas de ayer daba comienzo una marcha en la refinería donde participaban centenares de personas para mostrar su rechazo al ERTE planteado por Repsol en la planta y que afectaría a algo más de 200 trabajadores.
Los empleados apuntaban no entender los motivos de esta medida, ya que señalan que durante el principio de la pandemia eran considerados trabajadores esenciales y ahora son “prescindibles”.
Indican, además, que la medida, que indican que afectaría a casi un tercio de la plantilla, no solo tendrá consecuencias en ellos, “senón que terán un efecto negativo no traballo de numerosas empresas contratistas ademais de en toda a contorna”, afirmaban.
Con las manos en alto y entonando cánticos que tildaban el ERTE de “estafa” recorrieron parte del polígono de A Grela y llegaron hasta Meicende, para regresar a la refinería.
Además de los diversos sindicatos, varios grupos políticos, como el BNG, Marea Atlántica o Podemos, quisieron mostrar su apoyo a los trabajadores y se unieron a la marcha.
“Viendo el atisbo de que se está ya saliendo de la crisis y que en la actualidad va a haber más demanda no entendemos cómo ahora la empresa nos plantea este ERTE por sorpresa, después del esfuerzo que han realizado los trabajadores a lo largo de todo este año”, decía el presidente del comité de empresa, Jacobo Naya.