El complejo deportivo de A Barcala volverá a abrir sus puertas el 31 de mayo. Este anuncio llega después de varios meses de negociaciones en los que el Ayuntamiento trabajó para minimizar el desequilibrio económico y cumplir varios objetivos: por un lado, evitar un sobrecoste para los usuarios de la instalación y, por el otro, favorecer la sostenibilidad y viabilidad por parte de la empresa concesionaria para mantener los puestos del personal trabajador.

El concejal de Deportes e Xuventude, Daniel Mallo, celebró que “a pesar do desequilibrio económico, agravado pola crise sanitaria, a instalación poida abrirse sen o encarecemento para os usuarios e garantindo a sostenibilidade da empresa”. Mallo lamentó “os inconvenientes que os usuarios e usuarias tiveron durante os 80 días nos que a instalación estivo pechada”. El concejal reafirmó su confianza “nesta instalación, na que o Concello executará un proxecto de ampliación que mellorará o servizo para os veciños e veciñas”.

Influencia de la pandemia

El responsable del área agradeció “o incansable traballo dos departamentos de Deportes, Intervención e Secretaria, que foron clave para permitir a reapertura”.

La pandemia tuvo una gran afección en la instalación, que tuvo que adaptarse a las nuevas restricciones y medidas fijadas por los organismos sanitarios, sufriendo, además, varios cierres. Ante esta situación, y atendiendo en todo momento al criterio de los técnicos municipales, el Gobierno local trabajó para buscar una solución para todas las partes.

Según el informe técnico elaborado por el departamento de Deportes del Concello, “o interese público non aconsella ir resolvendo os contratos que, por circunstancias esóxenas, se convertan en disfuncionaris e antieconómicos por unha das partes, senón intentar que estes cheguen a bo termo mediante a restitución do seu equilibio económico”.