El gobierno local de Lugo, en concreto la Concellería de Cultura, ha confirmado este lunes, después de la reunión de la comisión de fiestas del San Froilán, que las patronales de Lugo volverán a quedarse, por segundo año consecutivo, sin recinto ferial, salvo que se produzca “un cambio en el protocolo establecido por la Xunta de Galicia” para prevenir los contagios de Covid-19.
Fue una mañana intensa en el Ayuntamiento de Lugo, porque un grupo formado por medio centenar de feriantes irrumpió en la casa consistorial al grito de “¡Queremos trabajar!”.
La edila de Cultura y responsable política de la organización de las patronales, Maite Ferreiro, habló con algunos de sus representantes, según indicaron fuentes del gobierno local, y les explicó que “con el actual protocolo de la Xunta de Galicia no es posible” montar el tradicional recinto ferial de las patronales.
Siempre según las mismas fuentes del gobierno local, los barraquistas, que fueron desalojados del Ayuntamiento, dijeron que iban a “hablar con la Xunta” para explicarle a la administración autonómica su situación en este caso.
Ante esa posibilidad, desde el gobierno local indicaron que “si hay un cambio en el protocolo sanitario y hay tiempo, se estudiará la situación”, de lo contrario, no habrá barracas en las fiestas por segundo año consecutivo.
El Partido Popular no participó en la reunión de la comisión de fiestas, según su portavoz, Ramón Carballo, para no “blanquear” las decisiones adoptadas por el BNG.