Las localidades de Curtis y Teixeiro amanecieron ayer sin agua potable tras cortarse el suministro al detectarse un vertido contaminante en la estación depuradora de agua potable (ETAP) de A Ratona.
En la noche del miércoles, explica el Ayuntamiento, se detectó “unha baixada repentina dos valores de clorolibre residual nos depósitos de cabeceira”, por lo que se decidió paralizar la actividad de la ETAP.
Analizadas las muestras del vertido se descubrió que se trataba de purines en el río, por lo que los depósitos fueron cerrados para su limpieza y la red fue vaciada para evitar el consumo.
En la mañana de ayer, la empresa que gestiona el abastecimiento municipal en Curtis informó de que el agua almacenada en el depósito del pueblo era potable, por lo que se restableció el suministro de forma temporal, pidiendo el uso responsable de la misma a los vecinos.
Cisternas
En Teixeiro no fue posible restablecer el suministro, por lo que tres camiones cisternas se apostaron en tres enclaves de la localidad para dotar de agua a los vecinos que acudiesen con recipientes y garrafas. La plaza de España, la plaza de la estación y las inmediaciones del CEIP de Teixeiro son los lugares donde se han colocado las cisternas y los usuarios pueden acudir a captar agua cuando lo necesiten. En Curtis también se dispondrán varios camiones, aseguran.
El Ayuntamiento apunta que en cuanto se disponga de datos favorables sobre las aguas se procederá a llenar los depósitos locales, aunque recuerdan que una vez restablecido el suministro pueden darse episodios de turbidez en el agua, aunque no se tratará de agua contaminada, aclaran.
Desde el Gobierno de Javier Caínzos señalaron que hasta nuevo aviso se está suministrando agua no potable y, por lo tanto, no apta para su consumo, debido a la previsión de que las condiciones del río no mejorarán a corto plazo. Además, las lluvias previstas para estos días pueden empeorar las condiciones actuales, advierten.