Parece increíble. En los últimos 50 años han muerto más mujeres por cuestiones de su sexo que hombres en todas las batallas del siglo XX. 40 millones de niñas y mujeres son abusadas y violadas cada año en el mundo. ¿Que nos está pasando?.
Las mujeres, en pleno siglo XXI, aún tienen que demostrar su valía, mientras que a los hombres se les presupone. Más mujeres mueren a manos de sus parejas o sus maridos, a pesar de haber presentado denuncias por malos tratos o violencia machista. Cierto es que la sociedad avanza y evoluciona muy lentamente pero hay cuestiones que deberían atajarse de raíz. La violencia de género es una de ellas y todos somos responsables.
Las diferentes administraciones públicas no se cansan de sugerir a las mujeres que no dejen de denunciar por miedo y que piensen que la justicia estará de su parte. El problema es que, muchas mujeres, siguen viviendo con miedo, desprotegidas por la propia familia y sus más allegados, mientras sus verdugos siguen haciendo vida normal y presumiendo de sus actos violentos.
Se acerca la conmemoración del Día Internacional de Lucha contra la violencia de la mujer, el 25 de noviembre, por eso tenemos que ser conscientes de que la violencia contra las mujeres es un obstáculo para la igualdad, el desarrollo, el feminismo y la paz de los pueblos impidiendo que éstas disfruten de sus derechos básicos y libertades fundamentales.