La undécima edición de la feria del dulce de convento, Expoconvento, que tenía previsto finalizar este jueves, día 9, agotó en la jornada de ayer sus existencias y su cierre se tendrá que adelantar.
La cita solidaria de cada puente de diciembre en la iglesia de los Capuchinos se ha consolidado como una de las ineludibles del calendario coruñés y son centenares las personas que cada año buscan los dulces más artesanales y tradicionales, llegados desde congregaciones religiosas de todo el país.
Los conventos coruñeses participantes son las Clarisas y las Carmelitas Descalzas
Según Javier López, director del evento, los visitantes llegan de toda Galicia y ciertos postres se agotan rápidamente. Lo que empezó, dice, como “un simple voluntariado” se ha convertido en una feria que suscita un gran interés y que suele generar “importantes colas”: “El primer día, el viernes 3, contabilizamos 704 tickets de caja”, explica.
Turrones, pastas, mantecados, polvorones, mazapán, pannetone y todo tipo de delicias elaboradas por monjas como las Clarisas y las Carmelitas Descalzas de A Coruña llegan cada año a la ciudad para endulzar los paladares más exigentes. Los asiduos a la feria destacan de los productos ofertados –había variedades de 37 conventos diferentes– su sabor “nada artificial” y la calidad de los ingredientes utilizados. Javier López, por su parte, destaca que las elaboraciones tienen recetas ancestrales, “algunas con más de 300 años, como la de la tarta de almendra de las Clarisas de la Ciudad Vieja”.
La cita tiene un carácter solidario, ya que todo lo recaudado está destinado a los participantes
Estos postres “divinos” sirven, además, para recaudar fondos para cada convento. La recaudación íntegra va para cada congregación, aunque el director de la feria hace un llamamiento a aquellos que se han quedado con ganas de más: “Las Carmelitas Descalzas y las Clarisas venden dulces todo el año en sus iglesias”.
Desde la organización piden disculpas a aquellos que se han quedado sin poder adquirir dulces debido a la finalización anticipada del evento. “Pido que la gente no se enfade, esto es una cita solidaria que solo tiene un fin, ayudar a las monjas a vender sus productos. Agradecemos, además, la colaboración del Xacobeo y Gadis”, comenta Javier López.
En España solo quedan cuatro ferias de este tipo: Madrid, Sevilla, Bilbao y A Coruña. Para la nueva edición de esta última habrá que esperar hasta 2022.