Cerca de quinientas personas acudieron al Obelisco para protestar contra el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela y lo que consideran un claro robo de los últimos comicios. Los gritos de “¡Edmundo presidente!” dejaban claro a quién consideraban ganador. Muchos agitaban en el aire las actas de los votos que prueban que el opositor había sido el verdadero vencedor de las elecciones y que, por tanto, Maduro se había situado totalmente fuera de la legalidad.
En el acto reinaba una mezcla de indignación y de nostalgia por la patria que se dejó sentir en la música caribeña que sonó a ratos, y que corearon entre lágrimas algunos de los presentes. Para no sentir tanta morriña, los organizadores recordaron que España no es una tierra extraña y, para probarlo, informó a todos los presentes de las raíces coruñesas de Simón Bolívar. Por lo menos, de la rama paterna.
Concentraciones como aquella se estaban repitiendo en cualquier punto del mundo donde existiera una diáspora venezolana. Personas cubiertas con la bandera estrellada, tocadas con gorras, escucharon atentamente las palabras de los ponentes. Entre ellos se encontraba la senadora del PP Rosa Gallego, que quiso transmitirles palabras de apoyo y esperanza.
Las pancartas y los eslogan flotaban en el ambiente. “¡Viva Venezuela libre!, Maduro, cabrón, robaste la elección”. Hubo un momento de emoción cuando entonaron el himno nacional y finalmente, pegaron a una bandera las copias de las actas electorales: “¡No nos rendiremos, las actas las tenemos!”.