A Coruña abraza la solidaridad de un Pancomido que llega para quedarse

A Coruña abraza la solidaridad de un Pancomido que llega para quedarse
Moncho (centro) y Manu (2d), junto a su equipo de Pancomido | Quintana

“Hoy no sé por qué pero voy a pasármelo bien, voy a pasármelo bien, muy bien” entona el grupo coruñés The Flows en medio de una soleada plaza de España llena de ciudadanos de un rango de edad amplio con una cosa en común: corean a grupo que se lo van a pasar muy bien. Tan alto parece el ánimo que cuando llega el punto final con ‘Mi gran noche’, uno piensa que lo que les queda de día será largo y feliz.


Música, gente cantando, una barra llena y vendedores sostenibles mimetizados con la euforia. Los chefs Manu Triay y Moncho Méndez, de taberna Triay y restaurante Millo, han conseguido que Pancomido, el evento de venta de tapas –realizadas con productos donados y basado en la economía circular– a beneficio de la Cocina Económica sea parte de las almas de los presentes. 

 

Ellos se muestran exultantes por el éxito de esta primera edición. Tal ha sido la buena acogida que han percibido que Moncho no duda, mientras sonríe, de que “hay que repetirlo el año que viene o antes”, de hecho inciden en que ya están dándole vueltas porque tal y como indica Manu “A cabeza non para y sí, Pancomido ha venido para quedarse”.

 

Arropados


No han estado solos en esta travesura solidaria. A su lado les sostienen Juan Fernández de Malte y La Checa y Miguel de Os Biosbardos. Juan pone la bebida– 3 barriles de cerveza rubia y uno de negra Budvar, donada por Hijos de Rivera –distribuidores en España y Portugal de este producto checo– para la ocasión.


Esos barriles se han terminado, lo que supone la venta de muchas cañas y pintas, subraya Fernández que apunta, además, que las raciones de pasta han volado. Él también piensa en una segunda edición en la que “intentar implicar a más gente que quiera aportar su grano a esta causa”. 


No es el único, Miguel, cuyo proyecto Os Biosbardos ha puesto el excedente de huerta para las tapas, destaca que esa salida para unos productos que aún tienen vida ha sido en un evento “fantástico, con un ambientazo genial y que puede servir de referencia para seguir haciéndolo y que cunda el ejemplo en agricultores y gente que pueda aportar, esto es una forma de ir a las elecciones todos los días”. A ellos les viene bien para “cumplir los objetivos de la Agenda 2030 y los de Desarrollo Sostenible”.


Los coruñeses tampoco han fallado. El habitual Mercado Sostenible ha tenido más visitantes  con lo que ello implica de visibilidad para sus productos, tal y como coinciden en señalar los responsables de Antonia Studio, Jerolas, Santuario Vacaloura, Renastur Celtibérica o A Castrexa.


Patricia y Beatriz creen que habría que hacer más cosas así, de forma habitual, en la ciudad y resumen el éxito del evento: “disfrutar con un plan diferente que supone ayudar a que la gente que tiene dificultades pueda tener un plato caliente todos los días”. 

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