Caída, retroceso, crisis. Las palabras que se suelen usar en los últimos tiempos para definir la demografía de España y Galicia tienen connotaciones negativas. El saldo demográfico suele salir a deber entre nacimientos y defunciones y en muchos municipios se echan las manos a la cabeza ante la pérdida de población. Sin embargo, el área coruñesa se resiste a ceder ante el pesimismo y anota cifras positivas. Así lo certifican los últimos datos oficiales, publicados este viernes por el INE (Instituto Nacional de Estadística) y que señalan que A Coruña y su área metropolitana cuentan con más población que hace exactamente un año.

Según estas cifras, la ciudad y los municipios de su área metropolitana ganaron casi 4.000 habitantes en los últimos 365 días, 3.888 para ser exactos. De ellos, 1.885 pertenecen a la cuenta de A Coruña, mientras que los 2.003 restantes los incrementaron los ayuntamientos de la comarca.

En términos absolutos -y dejando a un lado A Coruña y sus 249.261 habitantes- el municipio que más población gana es Oleiros (524), seguido muy cerca por Arteixo (522). A continuación se encuentran Sada (+266), Culleredo (+221), Miño (+193) o Betanzos (+179). Si nos vamos a una cuestión porcentual, los datos del INE apuntan a que el municipio que más creció entre 2023 y 2024 fue el de Miño (+2,85%), seguido de Sada (+1,57%) y Arteixo (+1,55%).

La estadística oficial también deja una reflexión: A Coruña podría superar el próximo año la barrera de los 250.000 habitantes. Se queda ahora en 249.261, pero de repetirse la inercia de los últimos años -crecimiento continuado desde 2020- la ciudad derribará el listó de los 250.000 con la llegada de las estadísticas de 2025.

En total, el área metropolitana coruñesa cuenta con 452.114 habitantes, con Oleiros (38.333), Arteixo (34.038) y Culleredo (31.185) como líderes en población.

En el lado contrario de la balanza de las buenas cifras de población se encuentran los únicos cinco municipios que pierden habitantes: Abegondo (-6), Aranga (-16), Vilasantar (-3), Paderne (-49) y Oza-Cesuras (-52), que sigue reduciendo el número de vecinos pese a la fusión municipal entre Oza dos Ríos y Cesuras. Todos ellos, excepto Paderne, venían de ir perdiendo cada año habitantes, una situación que, sin embargo, este año ha conseguido mitigar Vilarmaior, que tras acumular caídas en los últimos doce meses logré aumentar sus residentes.