A Coruña es muy pequeña: 37,8 kilómetros cuadrados. Esto explica su gran densidad de población, de las más altas de España. Pero es que, además, los coruñeses viven cada vez más apretados. El Instituto Galego de Estadística (IGE) anunció hoy que en julio se sobrepasó la cifra simbólica de los 250.438 habitantes. Es la tercera ciudad gallega que más crece.
A uno de enero de 2024, el censo era de 249.261. Cuando se conoció, el mes pasado, la alcaldesa, Inés Rey, lo tomó como una confirmación del éxito de las políticas del actual Gobierno local, a la vez que se marca un objetivo: “Nuestro reto es volver a pasar del cuarto de millón”, dijo. Hacía 30 años que no ocurría. Hoy esta ciudad crece otra vez porque hemos reactivado la vivienda y los polígonos que llevaban años parados, porque impulsamos la ciudad como polo tecnológico y porque estamos actuando en el espacio urbano para hacerlo más amable para los vecinos pero también para la implantación de nuevos negocios”.
Por su parte, expertos como el reputado geógrafo gallego Andrés Precedo comparten argumentos y opiniones con Rey. Precedo, que sitúa a A Coruña como una de las cuatro ciudades del Estado (junto a Málaga, Zaragoza y Madrid) que más crece económicamente en la actualidad, señala que este incremento poblacional tiene como principal causa precisamente este auge industrial, que además se ha acompañado, en su opinión, de una oferta mayor que la de años pasados en vivienda, con la concesión de más licencias urbanísticas y las rehabilitaciones que han afectado a barrios como Xuxán, Someso o San Pedro de Visma.
Triunfalismos aparte, desde el IGE señalan que en la evolución del último año (2023-2024) todos los grandes municipios han crecido, así que A Coruña no es una excepción. Es más, el primero fue Lugo (1,20%), seguido de Santiago (0,79%), así que A Coruña (0,77%) se queda en un tercer lugar. El último puesto queda para Vigo (0,21%).
Desde 2021 la población del municipio herculino se incrementó en un 1,51%, muy por encima de Galicia con un 0,28%. Si comparamos estos datos con los del resto de los siete grandes municipios gallegos, solo crecieron por encima de A Coruña: Lugo (1,90%) y Santiago (1,73%), mientras que la ciudad olívica creció un 0,30%.
En cuanto a los sexos, la proporción es, como siempre, favorable al as mujeres, de las que se contabilizan 134.482 en julio pasado, frente a 115.957 hombres. La edad media sigue manteniéndose entre los 45 y los 49 años, que han cumplido más de 21.000 coruñeses. También se confirma una de las tendencias demográficas más tristes: si julio de 2021, los niños de cuatro años o menos, eran 8.236, tres años después suman 7.480.
En el extremo están los octogenarios: las estadísticas de IGE señalan que cada vez hay más residentes que se sitúan entre los 85 y los 89 años en A Coruña. Si en 2021 eran 6.801, en 2024 ya eran 8.237. Casi un 18% de incremento de ciudadanos de más edad en tan solo tres años. Así queda patente que el aumento de la población no está directamente relacionado con el crecimiento vegetativo. Mientras las zonas más rurales de Galicia se siguen vaciando, y los pueblos se quedan sin habitantes, las ciudades son cada vez más populosas.